Un 85% de supervivientes de cáncer de cabeza y cuello sufre disfagia

La disfagia orofaríngea (DO) es un trastorno de la deglución que puede afectar hasta al 85% de los supervivientes de cáncer de cabeza y cuello. Este problema de salud puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de los pacientes, al aumentar los riesgos de malnutrición y atragantamiento. Lamentablemente, esta condición suele estar infradiagnosticada, lo que dificulta su adecuado tratamiento.

Es crucial comprender que la disfagia se define como una alteración en el transporte del alimento desde los labios hasta el esófago. Esto puede deberse a problemas en la eficacia del proceso, donde el bolo alimenticio no se transporta de manera adecuada, o en la seguridad, cuando el bolo entra en la vía respiratoria y puede causar complicaciones graves, como las neumonías aspirativas.

Identificando y Abordando la Disfagia Orofaríngea

Un estudio realizado por investigadores del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada y la Universidad de Granada reveló que la gran mayoría de los pacientes de cáncer de cabeza y cuello evaluados presentaban disfagia. La investigación concluyó que cerca de la mitad de la variabilidad en la disfagia podía explicarse por factores como la tos, la limitación de movilidad bucal y la mala calidad del sueño, siendo la movilidad bucal el factor más limitante.

Por ello, los autores subrayan la importancia de una identificación temprana y adecuada de estos síntomas, así como de una estrategia de tratamiento integral para abordar las secuelas en los supervivientes de cáncer de cabeza y cuello. El manejo de la disfagia requiere un equipo interdisciplinar que debe coordinarse en los diversos niveles de atención, incluyendo modificaciones en la dieta, rehabilitaciones logopédicas, abordajes nutricionales y, en casos concretos, tratamientos quirúrgicos.

El Papel Fundamental de la Logopedia en el Tratamiento de la Disfagia

Desde el Consejo General de Colegios de Logopedas (CGCL), se ha subrayado la importancia del trabajo logopédico en las personas con cáncer de cabeza y cuello, incluso cuando se realiza antes de la intervención quirúrgica. Esta intervención temprana ayuda a preparar físicamente las estructuras orofaríngeas y permite entrenar y automatizar las diferentes maniobras deglutorias, mejorando así el pronóstico de recuperación funcional tras la cirugía o la radioterapia.

En resumen, la disfagia orofaríngea es un problema de salud cada vez más prevalente entre los supervivientes de cáncer de cabeza y cuello, y requiere de una atención especializada y multidisciplinar para mejorar la calidad de vida de los pacientes. Es fundamental identificar tempranamente los síntomas y aplicar un abordaje integral que incluya la rehabilitación logopédica, las modificaciones dietéticas y, cuando sea necesario, tratamientos quirúrgicos. Solo a través de este enfoque holístico podremos hacer frente a los desafíos que plantea la disfagia orofaríngea en este grupo de pacientes.