El presidente estadounidense, Joe Biden, se comprometió a seguir trabajando para poner fin a la guerra en Gaza durante sus últimos meses en el cargo, tras anunciar su decisión de no postularse para la reelección.
«Trabajaré muy de cerca con los israelíes y los palestinos para tratar de encontrar la manera de poner fin a la guerra de Gaza y lograr la paz en Oriente Medio, y traer a todos esos rehenes a casa», declaró Biden en una llamada transmitida en directo.
Esta declaración se produjo justo antes del primer acto de campaña de la vicepresidenta Kamala Harris, quien se perfila como la candidata presidencial demócrata para las próximas elecciones.
La guerra en Gaza comenzó el 7 de octubre, cuando el movimiento islamista palestino Hamás lanzó un ataque que resultó en la muerte de 1.195 personas, en su mayoría civiles, y el secuestro de 251 individuos en el sur de Israel, según datos oficiales israelíes.
En represalia, Israel inició una ofensiva militar que ha causado la muerte de más de 39.000 personas en Gaza, principalmente civiles, de acuerdo con el Ministerio de Salud del territorio, gobernado por Hamás.
Las palabras de Biden se alinean con el anuncio de una próxima reunión entre el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y la vicepresidenta Harris en la Casa Blanca, informó este lunes un asesor de Harris.
1Reunión Biden y Netanyahu
Este encuentro será separado de otra reunión prevista entre Netanyahu y Biden, la cual está programada para el jueves, como confirmó más tarde un alto funcionario estadounidense.
Netanyahu, quien llegó a Washington este lunes, también tiene programado dar un discurso ante el Congreso el miércoles, en el que se espera aborde la situación en Gaza y la posición de Israel frente al conflicto.
Biden, que ha sido un firme defensor de Israel durante su administración, enfrenta una compleja situación diplomática mientras busca equilibrar el apoyo a su aliado y las presiones internacionales para poner fin al conflicto.
Su retirada de la candidatura presidencial ha aumentado la atención sobre Harris, quien ahora tiene la tarea de continuar con las políticas de la administración y posiblemente trazar su propio rumbo en la diplomacia del Medio Oriente.