El festival internacional reggae Rototom Sunsplash, que celebrará su 29ª edición en Benicàssim (Castellón), del 16 al 21 de agosto, ha logrado afianzar su «perfil familiar» con una amplia oferta de actividades musicales, deportivas, de circo, baile y talleres de ciencia, en un recinto sin masificaciones y con un espacio de acampada totalmente vallado para ofrecer un entorno más seguro a las familias con niños.
La organización prevé mantener las cifras de público infantil y juvenil registradas el año pasado, cuando más de 21.000 menores de 13 años disfrutaron junto a sus familias de la experiencia de vivir un festival de gran formato en un entorno seguro y sin aglomeraciones. Estas cifras refuerzan el carácter familiar de este encuentro internacional reggae, uno de los más grandes de Europa por su duración -seis días-, sus siete escenarios y sus docenas de espacios extramusicales que ofrecen actividad casi las 24 horas del día, atrayendo a un público de más de 220.000 personas de 77 nacionalidades.
UNA CIUDAD DEL REGGAE SIN MASIFICACIONES
Los 300.000 metros cuadrados sobre los que se extiende esta ciudad del reggae próxima al Mediterráneo permiten evitar las masificaciones. Los espacios reservados a los conciertos son amplios, de modo que es habitual ver a familias enteras con carritos disfrutando de las actuaciones musicales en un ambiente cómodo y seguro. Además, se habilita un espacio reservado para familias en el entorno del escenario principal para que puedan disfrutar con tranquilidad de cada concierto junto a los más pequeños.
Por otro lado, el recinto es accesible y dispone de zonas de sombra y descanso. En él se levantan diferentes espacios con agenda propia dirigida al público más menudo, que innovan edición tras edición en sus actividades. Es el caso de Magicomundo, con zona de juegos y aprendizaje y sesiones de cuentacuentos, talleres y actividades musicales -también en torno al reggae- para bebés y niños, o del mercado artesano, con decenas de talleres creativos cada día.
El público adolescente también tiene su espacio con el área Teen Yard, enfocada a las actividades deportivas y la cultura urbana, que acogerá por primera vez torneos de baloncesto y nuevas estructuras de parkour y skate. Además, el festival estrena este verano el espacio Discovery Lab, con talleres y shows en torno a la ciencia, y el área de cultura africana Jamkunda, que organiza cada tarde sesiones de baile afromoderno sin límite de edad.
UNA APUESTA POR EL PÚBLICO FAMILIAR
La conexión del público familiar e intergeneracional con la música es uno de los ejes del festival, y cada día el inicio de los conciertos lo marcan los desfiles hacia el Main Stage al que se suman grandes y pequeños a ritmo de batucada y, por primera vez este año, de una brass band de reggae y ska, Zebrass Marching Band.
Estas dinámicas participativas marcan la transición entre el festival de día y el festival de noche que aúna Rototom Sunsplash y con la que «potencia la singularidad de la cita dentro de la escena estatal de festivales«, según la organización.
El guiño al público familiar se refleja también en la política de entradas, con abonos gratuitos para menores de 13 años y, por primera vez este año, un descuento del 50% en el precio de las entradas para jóvenes de entre 13 y 17 años.
Además, favorecer el alojamiento del público que viaja con niños es «otra de las prioridades» del festival, que dispone de más de 400 parcelas para familias con niños en la zona de acampada anexa al recinto de conciertos, con rafia de sombreo, baños y duchas reservados y más alejadas de los focos de sonido. Este espacio con acceso limitado a familias con niños está totalmente vallado para ofrecer un entorno más seguro.
En definitiva, el Rototom Sunsplash se ha consolidado como un festival familiar de referencia en la escena musical española e internacional, con una apuesta clara por las actividades y el bienestar de los más pequeños, convirtiéndose en un espacio seguro y cómodo para que familias enteras puedan disfrutar de la mejor música reggae.
