La Asociación Síndrome de Down de Granada ha celebrado que Carolina, una niña con síndrome de Down que fue «expulsada injustamente de la Escuela de Verano Norte tras solo dos días de asistencia», se vaya a reincorporar este jueves a este programa y «pueda ejercer su derecho a participar, de forma real y efectiva» en esta actividad.
El programa, que cuenta con la financiación del Ministerio de Igualdad, la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Granada, readmitirá a la menor y el grupo en el que participa contará a partir del jueves con un recurso adicional que favorecerá su inclusión en la actividad.
Colaboración y Soluciones Exitosas
Francisco Hidalgo, presidente de Down Granada, ha valorado «muy positivamente el cambio de criterio del Ayuntamiento y de la Obra Social Padre Manjón porque lo importante –ha dicho– es que Carolina pueda volver a la escuela de verano». Para Hidalgo, «este es un triunfo de la persistencia y del trabajo conjunto de la familia, la Asociación Down Granada y la colaboración de los medios de comunicación.
Desde el primer momento, la asociación «ha tratado de solucionar el tema por la vía del diálogo con el Ayuntamiento de Granada» y los técnicos de Down Granada han asesorado a los profesionales de la escuela para que esta reincorporación se produzca con éxito y haya una real inclusión de la niña en las actividades programadas, ya que «lo importante era y es que Carolina ejerza su derecho a participar».
Lecciones Aprendidas y Mejoras Futuras
Con este caso, lo que ha quedado claro, en opinión de Hidalgo, es que «estas escuelas de verano deben tener la planificación y los recursos necesarios para que sus actividades sean totalmente inclusivas; por lo que las administraciones deben adoptar medidas proactivas y planificadas que eviten cualquier tipo de discriminación«.
La alcaldesa de Granada, Marifrán Carazo, ha destacado la «mediación» del Ayuntamiento para alcanzar soluciones de cara a que la niña sea admitida. Tras contactar con la Asociación Granadown y la Obra Social Padre Manjón, se visitó la escuela para abordar el asunto y resolver la situación excepcional, ya que el programa «cuenta también con otros niños con discapacidad en la misma escuela que sí pueden cumplir con el programa de actividades y excursiones previsto».
Finalmente, se ha confirmado que se admitirá a la menor, dotándola de manera excepcional este año de un cuidador específico que pueda atender sus necesidades, así como de una persona por parte de la Asociación Granadown que orientará durante varios días su labor. Todo ello para garantizar la inclusión y el ejercicio de los derechos de los niños con síndrome de Down en este tipo de actividades.
