El Estado Islámico (ISIS), una de las organizaciones terroristas más activas del mundo, está resurgiendo en Siria e Irak, los mismos territorios donde surgió originalmente.
Esta preocupación ha sido confirmada recientemente por el Ejército de Estados Unidos. Según el Mando Central del Ejército estadounidense (CENTCOM), encargado de las operaciones en Oriente Próximo, ISIS está recuperando la capacidad que perdió tras la caída del «califato» que había establecido en estos países.
Entre 2014 y 2017, esta organización aterrorizó al mundo con numerosos atentados. Este año, ISIS ha llevado a cabo 153 ataques en Siria e Irak, y de seguir a este ritmo, podría duplicar el número de ataques del año pasado.
Este incremento en la actividad es visto como un intento de la organización por volver a operar plenamente después de varios años de capacidad reducida.
En respuesta a estos ataques, Estados Unidos y sus socios, las Fuerzas de Seguridad Iraquíes y las Fuerzas Democráticas Sirias, han realizado 196 operaciones en los primeros seis meses del año.
Estas acciones resultaron en la muerte de 44 agentes del Estado Islámico y la captura de 166 más. La mayoría de estas operaciones se llevaron a cabo en Irak, donde se abatieron a 30 agentes y se detuvieron a 74 en 137 operaciones.
En Siria, se realizaron 59 operaciones, resultando en 14 muertos y 92 detenidos. A pesar de estos esfuerzos, aproximadamente 2.500 combatientes de ISIS siguen libres en el Estado Islámico.
Entre los abatidos se encuentran ocho altos cargos, lo que ha debilitado la capacidad de ISIS para realizar operaciones externas en Estados Unidos y países aliados. Michael Erik Kurilla, jefe del CENTCOM, asegura que siguen centrados en atacar a aquellos miembros de ISIS que buscan realizar operaciones fuera de Siria e Irak.
1Situación del Estado Islámico
Aaron Zelin, experto en yihadismo del Washington Institute for Near East Policy, advierte que este resurgimiento es una realidad preocupante que no se veía desde 2017.
Según Zelin, la situación actual de ISIS es más integrada a nivel global que nunca antes, presentando un desafío más complejo comparado con Al Qaeda en su momento. Esta nueva reconstrucción de ISIS plantea una amenaza que, si no se aborda rápidamente, podría repetir la historia de terror en los próximos meses y años.
El resurgimiento del Estado Islámico en Siria e Irak es una señal de alarma para la comunidad internacional. La intensificación de sus ataques y la persistencia de sus combatientes libres subrayan la necesidad de una respuesta coordinada.
