Caso Begoña Gómez: Pedro Sánchez pidió la dimisión «por dignidad» de Mariano Rajoy

Pedro Sánchez es el segundo presidente del Gobierno en activo llamado a declarar ante un Juzgado. Lo hará, previsiblemente, el próximo 30 de julio, tal y como ha determinado el juez del Juzgado de Instrucción 41 de Madrid Juan Carlos Peinado, que indaga sobre presuntos delitos cometidos por Begoña Gómez, como tráfico de influencias y corrupción en los negocios.

«Es un día, por desgracia, negro para la historia de nuestra democracia porque por primera vez un presidente del Gobierno en ejercicio se tiene que sentar en los tribunales a declarar por un caso de corrupción de su partido», afirmó hace siete años el presidente del Gobierno en una declaración institucional en Ferraz.

«Hay un momento en el que las palabras dejan de ser suficientes y uno debe mostrar lo que es. Yo dimití para defender mis convicciones…y yo le pregunto señor Rajoy dónde están las suyas. Ahora mismo para España es mucho mejor que usted abandone la presidencia del Gobierno a que permanezca en ella», aseguró Pedro Sánchez en 2017, cuando Mariano Rajoy fue llamado como testigo en el juicio del caso Gürtel.

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El presidente del Ejecutivo se acogió a su propia experiencia para dejar el cargo en el PSOE, tras intentar realizar una votación de tapadillo un año antes, creando un cisma sin precedentes en el seno del partido.

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Con estas mismas palabras, el Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo presiona a Pedro Sánchez para abandonar La Moncloa tras ser llamado como testigo, al estar presente en reuniones con el empresario Juan Carlos Barrabés, su esposa y el gurú económico del PSOE, Manuel de la Rocha, que pilota los fondos europeos.

En este sentido, el PP pide la dimisión ante una «situación insostenible», donde Begoña Gómez está investigada por tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Además, la esposa podría sumar otros dos delitos al cóctel: usurpación profesional y apropiación indebida, según los escritos de Manos Limpias y de la Universidad Complutense que estudia ahora el juez Peinado.

EL SILENCIO DEL PSOE EN REDES SOCIALES

En 2017, Pedro Sánchez tenía exigencias para Mariano Rajoy, pero el presidente del Gobierno no aplica los mismos consejos que ofrece a terceros. Ahora, Pedro Sánchez no habla de dimisión, como tampoco el PSOE, cuya cuenta de Twitter ha pasado por alto este asunto. No hay palabras «por la dignidad de nuestra democracia» o por la «mancha en el día negro», como afirmó en una intervención solemne con el eslogan: «Somos la izquierda».

De hecho, Pedro Sánchez apeló a la «dignidad» de Mariano Rajoy para no arrastrar el prestigio de las instituciones. Por este motivo, los ‘populares’ exigen a Pedro Sánchez que dimita y convoque nuevas elecciones. Pero en el PSOE no están ni mucho menos por esa labor.

Pedro Sánchez no dimite a pesar de pedirlo a Rajoy tras ser llamado como testigo en el caso Gürtel
Pedro Sánchez no dimite a pesar de pedirlo a Rajoy tras ser llamado como testigo en el caso Gürtel

Pedro Sánchez está vinculado con Barrabés desde 2015, cuando era el líder de la oposición. La cita fue el 4 de abril de 2015. El presidente del Gobierno recibía a varios representantes de la sociedad oscense durante un parón de sus vacaciones de Semana Santa en Benasque. Begoña Gómez y sus hijas recibían clases de esquí allí habitualmente, pero aquel día el líder socialista en la oposición recibía a 40 personas convocadas por Félix Jordán de Urríes, entonces candidato socialista al ayuntamiento de ese municipio.

La cita se celebró en un hotel y entre los asistentes estuvo Juan Carlos Barrabés, en representación de la Escuela de Negocios del Pirineo. Sánchez estuvo acompañado del responsable regional del partido, un semidesconocido Javier Lambán y el responsable provincial, Antonio Cosculluela. Pedro Sánchez habló apenas durante 15 minutos. Recordó que en las navidades de 2014 ya había pasado las vacaciones en Cerler y después se reunió con los candidatos socialistas a las elecciones municipales de aquel año en el valle del Benasque.