La crisis de los migrantes no acompañados que llegan a las costas de Canarias ha llevado a la comunidad autónoma a reclamar una modificación urgente de la Ley de Extranjería. El Gobierno de Canarias busca garantizar un tratamiento humanitario a estos menores y hacer frente a un escenario que se prevé complejo en los próximos meses.
El portavoz del Gobierno de Canarias, Alfonso Cabello, ha señalado que la comunidad autónoma exige que el Ejecutivo central lleve al próximo Consejo de Ministros, el 30 de julio, esta modificación de la ley como decreto ley. Esto paralelamente a la aprobación de la tramitación de la norma en el Congreso de los Diputados durante esta semana.
Situación Crítica en las Costas Canarias
En los últimos días, Canarias ha registrado la llegada de 500 migrantes a sus costas, 75 de ellos menores. Cabello subraya que no solo se detecta un mayor número de menores entre las embarcaciones, sino que también se enfrentan a dramas humanitarios de primer nivel, con un incremento en el número de fallecidos que llegan a las islas.
El portavoz del Gobierno de Canarias recalca que este no es un problema exclusivo de la comunidad autónoma, sino que se trata de una cuestión humanitaria que atañe al conjunto de la Unión Europea y al Estado español. Por ello, considera fundamental la colaboración y la modificación normativa para poder hacer frente a esta situación.
Según la información manejada, se prevé que en los próximos meses el número de llegadas a Canarias pueda incrementarse de manera muy importante, algo que desborda por completo los recursos de la comunidad autónoma.
Necesidad de Acción Inmediata
Ante este escenario crítico, Cabello afirma que es mañana cuando se debe pronunciar y dar la cara para apoyar o no la modificación de la Ley de Extranjería. Esta reforma busca garantizar un trato humanitario a los menores migrantes no acompañados que llegan a las costas de Canarias.
La presión sobre los recursos de la comunidad autónoma, sumada a la gravedad de los dramas humanitarios que se están viviendo, exigen una respuesta urgente y coordinada entre el Gobierno de Canarias y el Ejecutivo central. Solo así podrán hacer frente a una situación que se prevé que empeore en los próximos meses.
