El pastel de berenjena con patatas y champiñones es una opción deliciosa y nutritiva para una velada genial. Este plato combina la suavidad de las berenjenas asadas con la textura cremosa de las patatas y la intensidad de los champiñones. Para comenzar, necesitarás ingredientes frescos y de calidad: berenjenas, patatas, cebolla, ajo, champiñones portobello, tomate frito, mantequilla, harina, leche desnatada, queso rallado, hierbas provenzales, nuez moscada, pimienta blanca, sal, pimienta negra, aceite de oliva y albahaca fresca.
Para preparar el pastel de berenjena, primero se deben pelar y cortar las patatas en rodajas de un centímetro de grosor, haciendo lo mismo con las berenjenas. Disponer las rodajas en una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado, sazonarlas con sal, pimienta y hierbas provenzales, rociarlas con aceite de oliva y hornearlas a 200°C durante unos 15 minutos. Este paso permite que las verduras se ablanden y adquieran un sabor intenso antes de montar el pastel. Retira las verduras del horno y resérvalas para el siguiente paso de la receta.
Relleno del pastel de berenjena y patatas
El siguiente paso en la elaboración del pastel de berenjena es preparar el relleno. Cortar la cebolla en juliana y pocharla con una pizca de sal en una sartén con un poco de aceite de oliva. Añadir el diente de ajo picado y los champiñones cortados en láminas, salteándolos a fuego medio-alto hasta que estén dorados. Luego, incorporar el tomate frito, mezclando bien y dejando que hierva ligeramente. Es importante probar y ajustar la sazón en este punto para asegurar que los sabores estén bien equilibrados.
Para hacer la bechamel del pastel de berenjena, deshacer la mantequilla en un cazo a fuego medio, añadir la harina y cocinar durante unos minutos, removiendo constantemente. Verter la leche desnatada poco a poco, batiendo con unas varillas para evitar que se formen grumos. Cocinar hasta que la mezcla espese, sazonando con sal, pimienta blanca y nuez moscada. La bechamel debe tener una consistencia suave y cremosa, que complementará perfectamente las capas de verduras en el pastel.
Cocinar en el horno hasta gratinar
El montaje del pastel de berenjena comienza enmantecando ligeramente un molde circular. Colocar una capa de patatas horneadas en la base, cubrir con los champiñones y tomate, y luego añadir una capa de berenjenas. Verter la bechamel sobre las capas, asegurándose de que quede bien distribuida. Espolvorear queso rallado al gusto por encima y añadir unos taquitos de mantequilla para un gratinado perfecto. Introducir el molde en el horno y gratinar hasta que la superficie esté dorada y crujiente.
Al sacar el pastel de berenjena del horno, déjalo reposar unos minutos antes de servir para que los sabores se asienten y sea más fácil de cortar. Este pastel se puede acompañar con una ensalada fresca de albahaca y tomates cherry, añadiendo un toque de frescura que contrasta con la cremosidad del plato principal. También se puede servir con un buen pan artesanal para completar la comida.
