La jueza decana de Barcelona lanza la voz de alarma sobre la calendarización de juicios penales acelerados hasta 2026

En un panorama desafiante, la jueza decana de Barcelona, Cristina Ferrando, ha emitido una alerta sobre la creciente carga de trabajo que enfrenta el sistema judicial de la ciudad. Según sus declaraciones, durante el 2023 recibieron 20.000 asuntos más que el año anterior, lo que ha generado una preocupante acumulación de casos pendientes.

La magistrada ha expresado su preocupación por esta situación, señalando que los planes de refuerzo implementados hasta el momento han resultado insuficientes. Ferrando ha detallado que, de acuerdo con los estudios de carga de trabajo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Barcelona necesitaría 60 nuevas unidades judiciales para poder ofrecer una respuesta adecuada a la demanda, lo que implicaría la apertura de dos nuevos edificios en la Ciudad de la Justicia.

La Necesidad Imperiosa de Ampliar los Juzgados Penales y de Primera Instancia

En el ámbito penal, la jueza decana ha alertado sobre la problemática de la multirreincidencia, la cual ha complicado la celebración de juicios rápidos, ya que ahora se requiere una investigación previa que tenga en cuenta los antecedentes penales y el valor de los objetos sustraídos. Esto, según Ferrando, «ralentiza mucho el proceso» y ha instado a la creación de una oficina especializada para filtrar estos casos.

Asimismo, la magistrada ha enfatizado la necesidad de ampliar los juzgados de lo penal, donde actualmente cuentan con cuatro jueces de apoyo que dictan «más de 2.000 sentencias de juicio rápido al año«, pero cuyo esfuerzo no ha sido suficiente para hacer frente al incremento de asuntos registrado este año.

En cuanto a los juzgados de primera instancia, Ferrando ha señalado que el volumen de ingresos recibido es «muy superior al que puede ser asumido de manera racional«, y ha indicado que se necesitarían 23 nuevos juzgados para poder resolver los asuntos en un tiempo razonable. Si bien se han implementado medidas como la incorporación de 5 jueces de refuerzo, la jueza decana ha considerado que estas acciones son «insuficientes» para hacer frente a la carga de trabajo.

Desafíos en los Juzgados Mercantiles y Sociales

En el ámbito mercantil, Ferrando ha explicado que los asuntos relacionados con la aplicación de la Ley de Vivienda han aumentado en complejidad, lo que «es muy complicado» de abordar. Además, ha señalado que los casos en materia concursal ocupan el 80% de los casos en estos juzgados, «saturando los juzgados para atender otras materias«. Para abordar esta situación, la magistrada ha anunciado que están trabajando en una propuesta para crear una unidad de tramitación concursal y estudian incorporar Inteligencia Artificial en los procesos más sencillos.

En los juzgados sociales, la jueza decana ha lamentado que los juicios ya se estén señalando para 2026, lo que contrasta con el plazo legal de 15 días. Asimismo, ha explicado que el protocolo de «Papel cero» implementado por la Generalitat está dificultando los procedimientos debido a la falta de mecanismos eficaces para el traslado documental.

En resumen, el sistema judicial de Barcelona se enfrenta a un tsunami de asuntos, con un incremento de 20.000 casos más en 2023 respecto al año anterior. La jueza decana ha hecho un llamado urgente a la creación de nuevos órganos judiciales y a la implementación de medidas efectivas para agilizar los procesos y hacer frente a esta creciente demanda. La situación, según sus propias palabras, requiere de una respuesta ágil y contundente por parte de las autoridades competentes.