Diana Iovanovici-Sosoaca, diputada de extrema derecha del Parlamento Europeo, fue expulsada del hemiciclo antes de la votación para decidir sobre el nuevo mandato de Úrsula von der Leyen. La expulsión ocurrió después de una intervención acalorada durante un debate sobre los derechos fundamentales en Europa.
Valérie Hayer, diputada del grupo Renovar Europa, instó durante su discurso a que se incluya el derecho al aborto en la Carta Europea de Derechos Fundamentales. «No podemos seguir dudando.
En toda Europa, está la tentación de echar marcha atrás a los valores fundamentales. Es un peligro real. Le pediría que haga lo posible para que se incluya el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo», reclamó Hayer a Von der Leyen.
La intervención de Hayer provocó una reacción inmediata de Sosoaca, quien comenzó a gritar y se puso un bozal, en señal de protesta. Esta no es la primera vez que Sosoaca protagoniza un incidente similar; el día anterior había pedido «limpiar el Parlamento Europeo de demonios».
La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, respondió rápidamente a la interrupción. «Es la tercera vez que hace esto. Yo pido que se saque a esta persona de la sala», declaró Metsola, lo que fue recibido con aplausos de muchos eurodiputados. Al ver que Sosoaca continuaba gritando, Metsola reiteró: «Repito, pido que se saque a esta persona del hemiciclo, ahora».
Finalmente, los miembros de seguridad escoltaron a Sosoaca fuera del hemiciclo. Metsola, visiblemente seria y molesta, advirtió a Sosoaca que no gritara a los ujieres y añadió: «Yo creo que ya has hablado suficiente», entre los abucheos de otros eurodiputados.
1Diana Iovanovici, líder del partido extremista en Rumanía
Diana Iovanovici-Sosoaca es la líder del partido de extrema derecha rumano SOS y ha sido criticada por sus vínculos con Moscú. La agencia de noticias Sputnik, controlada por el Estado ruso, la etiquetó como «la política de 2021 en Rumanía». Además, es conocida por su negacionismo del COVID-19 y su postura antivacunas.
La expulsión de Sosoaca marca otro episodio tumultuoso en el Parlamento Europeo, subrayando las tensiones políticas y las divisiones sobre temas clave como los derechos reproductivos y la influencia de la extrema derecha en la política europea.
