Cómo preparar una esponjosa masa para pizza para chuparte los dedos

La masa para pizza es la base de cualquier buena pizza, y lograr una masa esponjosa y perfectamente cocida es todo un arte. Algunas personas prefieren prepararla desde cero porque les permite controlar cada aspecto del proceso, desde la textura hasta el sabor.

Si te gustaría prepararla a ti mismo, aquí te explicaremos paso a paso cómo crear una masa para pizza esponjosa que será la preferida de todos en casa.

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Déjala reposar, al horno y a disfrutar

Una vez que la masa tenga el doble de su tamaño, divídela en porciones según el tamaño de las pizzas que desees hacer. Forma cada porción en bolas pequeñas y deja reposar nuevamente, cubiertas con un paño húmedo, durante unos 15-20 minutos. Este reposo final es lo que hace que la masa se relaje antes de estirarla, lo que facilita darle la forma deseada sin que se encoja.

Estira cada bola de masa sobre una superficie enharinada, para lo cual puedes usar tus manos o un rodillo, hasta obtener el grosor y forma deseados. Coloca la masa estirada en una bandeja para pizza enharinada o sobre una piedra para pizza precalentada.

Hornea tu pizza en un horno precalentado a alta temperatura, que puede ser de unos 230°C durante unos 10-15 minutos, o hasta que la base esté dorada y crujiente y el queso burbujeante. Así obtendrás una deliciosa pizza con una masa esponjosa y perfectamente cocida que seguramente será un éxito en tu mesa.

Preparar masa de pizza desde cero es gratificante, te permite controlar la calidad de los ingredientes, y además personalizar cada detalle según tus gustos. Con esta receta, podrás disfrutar de pizzas caseras con una masa esponjosa que conquistará los paladares de todos en tu hogar.

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