La Asociación Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas (Asfaspro), la Asociación Unificada de Militares (AUME) Españoles y la Unión de Militares de Tropa (UMT) trasladaron esta semana al Defensor del Pueblo su hartazgo y malestar por el «ninguneo» al que se ven sometidos del Ministerio de Defensa ante su situación, que califican de «desesperada». También hicieron llegar a Ángel Gabilondo «el grave problema de las retribuciones militares, siendo éstas indignas y no siendo suficientes para llegar a fin de mes», según han explicado en un comunicado conjunto difundido por las tres asociaciones. Un soldado de tropa o marinero cobra entre 1.200 y 1.300 euros brutos al mes.
Las asociaciones con representación en el Consejo Personal de las Fuerzas Armadas (Coperfas), el órgano de interlocución con el Ministerio de Defensa, han mantenido una reunión con el Defensor del Pueblo para exponerle el «déficit» de derechos que sufren los militares y la necesidad de abordar modificaciones legislativas para solucionarlo.
ASIMETRÍA ENTRE GASTOS EN DEFENSA Y SUELDOS
Durante el encuentro han denunciado la «indignante asimetría» entre el gasto en medios y materiales de guerra y «las miserables» retribuciones del personal, así como el «menosprecio» de la ministra de Defensa, Margarita Robles, que «obvia» la atención a los militares y a sus legítimos representantes. Asfaspro, AUME y UMT han planteado la necesidad de una nueva ley integral de la carrera militar y la modificación de la Ley Orgánica de Derechos y Deberes que acerque a los miembros de las Fuerzas Armadas al resto de la ciudadanía y han abogado por una nueva ley de movilidad «que palíe los graves problemas a que se enfrenta este personal expuesto a constantes cambios de domicilio».
Este encuentro con el Defensor del Pueblo se enmarca en la decidida apuesta de las asociaciones de militares por trasladar a instituciones, grupos políticos y agentes sociales «la grave situación del personal de las Fuerzas Armadas: retribuciones indignas, carrera militar obsoleta, derechos y conciliación devaluados. Acción que continuará hasta que la sociedad pueda conocer la situación real de sus Fuerzas Armadas», dicen en un comunicado conjunto.