El juez ha informado a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, que tiene la «obligación» de acudir el lunes a los juzgados de Plaza de Castilla para seguir la declaración como testigo del empresario Juan Carlos Barrabés. Asimismo, le ha advertido que si no comparece ni alega «causa justa» para su ausencia, podrá dictar una «orden de detención».
OBLIGACIÓN DE ASISTIR
En una cédula de citación firmada por la letrada de la Administración de Justicia (LAJ) del Juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid, fechada el 17 de junio, se especifica que Begoña Gómez «tiene el deber de comparecer asistida de abogado de su elección» el lunes 15 de julio a las 11:00 horas. Deberá acudir a la planta sexta de los Juzgados de Plaza de Castilla, donde se encuentra la sala de vistas del juzgado dirigido por el juez Juan Carlos Peinado.
La letrada resalta que si Gómez no cumple con esta citación y no presenta una «causa justa» que le impida asistir, se podría convertir la citación en una orden de detención. Esta medida tiene como objetivo garantizar la asistencia obligatoria de Begoña Gómez a la declaración como testigo.
TESTIGO
En este caso, Juan Carlos Barrabés ha sido convocado para declarar de momento como testigo debido a razones de salud que podrían dificultar su presencia en un eventual juicio futuro y porque la causa que le afecta está siendo instruida por la Fiscalía Europea. La declaración del lunes se considera una prueba preconstituida que podrá utilizarse si se celebra un juicio.
Begoña Gómez ya acudió al juzgado el pasado viernes 5 de julio para declarar como investigada. Sin embargo, se pospuso el interrogatorio para el 19 de julio porque no se le había notificado correctamente una de las querellas aportadas al procedimiento. Durante esa ocasión, se llevó a cabo un gran despliegue policial en las inmediaciones de Plaza de Castilla y se autorizó su entrada al juzgado por el garaje por motivos de seguridad.
La obligación de Begoña Gómez de presentarse en el juzgado se basa en la importancia de su testimonio, que puede influir de manera significativa en el desarrollo posterior de la causa judicial. La advertencia de una posible orden de detención subraya la seriedad de la citación y la necesidad de cumplir con las obligaciones legales.
El cumplimiento de las órdenes judiciales es vital para mantener la integridad y el funcionamiento del sistema legal. No comparecer en el juzgado sin una causa justificada no solo puede resultar en una orden de detención, sino que también puede afectar negativamente la percepción pública y legal de la persona implicada.
Cabe recordar que Gómez acudió al juzgado el pasado viernes 5 de julio para declarar como investigada, pero finalmente se pospuso el interrogatorio para el 19 de julio porque no se le había notificado correctamente una de las querellas aportadas al procedimiento. Ese día se llevó a cabo un gran despliegue policial en las inmediaciones de Plaza de Castilla y se autorizó su entrada al juzgado por el garaje por cuestiones de seguridad.
Según el juez, Gómez tendrá que volver el lunes 15 para presenciar el interrogatorio a Barrabés, que seguiría ingresado en un centro hospitalario debido a su estado de salud. Su declaración se celebrará después de que el pasado mayo el juez ordenara a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que le remitiese los contratos que fueron otorgados al empresario Juan Carlos Barrabés desde Red.es, el Consejo Superior de Deportes y el Ayuntamiento de Madrid.
El instructor pidió a los agentes que recabasen los expedientes de contratación a la entidad Innova Next SLU, propiedad de Barrabés. En la denuncia que dio origen a la investigación, Manos Limpias aseguraba que uno de los empresarios «beneficiados» por las «recomendaciones o avales» de Begoña Gómez es Barrabés, a quien se le habría adjudicado licitaciones públicas por valor de 10 millones de euros.
«Este empresario además montó el Máster de Transformación Social Competitiva de la denunciada», sostenía la denuncia, que añadía que la cátedra de Begoña Gómez fichó además como profesor asociado a ese empresario.
Recientemente, el juez Peinado señaló que estaba investigando «todos los actos, conductas y comportamientos» llevados a cabo por Gómez «desde que su esposo es el presidente del Gobierno que se contienen en la denuncia inicial» presentada por Manos Limpias por tráfico de influencias, en relación con sus presuntos vínculos con el empresario Juan Carlos Barrabés y los contratos con éste que no han quedado en manos de la Fiscalía Europea.
