Un incidente alarmante ha sacudido la tranquilidad de una localidad en Baleares. Un niño de apenas cuatro años ha sufrido un grave ahogamiento mientras disfrutaba de un día en un parque acuático de Sa Coma, en el municipio de Sant Llorenç des Cardassar. Las autoridades y los servicios de emergencia rápidamente respondieron al llamado de auxilio, desencadenando una operación de rescate y atención médica que tuvo como prioridad salvar la vida del menor.
Según los informes, el suceso ocurrió este sábado alrededor de las 12:27 horas, cuando el Sistema de Atención Médica de Urgencia (SAMU 061) recibió el aviso de que un niño de cuatro años había sufrido un ahogamiento en la piscina del parque acuático. Al llegar al lugar, el menor fue encontrado en parada cardiorrespiratoria, lo que requirió la rápida intervención de los equipos de emergencia para iniciar las maniobras de reanimación.
RÁPIDA MOVILIZACIÓN DE LOS SERVICIOS DE EMERGENCIA
Desde la Central de Coordinación de Urgencias Médicas (CCUM), se dio aviso a los recursos asistenciales más cercanos para acudir de inmediato al lugar del incidente. Se movilizó un vehículo de intervención rápida con un médico, un enfermero y un técnico, así como una unidad de soporte vital básico. Además, se solicitó la presencia del médico del Punto de Atención Continuada (PAC) de Son Servera, dado su proximidad al sitio.
Al llegar al parque acuático, el equipo asistencial continuó con las maniobras de reanimación y logró estabilizar al niño, recuperando su pulso. Posteriormente, se procedió al traslado del menor a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) Pediátrica del Hospital Universitario Son Espases, donde recibiría la atención médica especializada que requería su delicado estado de salud.
ALERTA VERDE PARA FACILITAR EL TRASLADO
En paralelo a las acciones de rescate y atención médica, la Guardia Civil activó una alerta verde para facilitar el traslado del menor al hospital. Esta medida tenía como objetivo garantizar la rapidez y fluidez del recorrido, permitiendo que el niño recibiera la atención médica urgente que su condición crítica demandaba.
Este lamentable incidente ha puesto de manifiesto la importancia de la vigilancia y la seguridad en los parques acuáticos, especialmente cuando se trata de la presencia de menores. Asimismo, ha evidenciado la eficacia y la coordinación de los servicios de emergencia, que actuaron de manera ágil y diligente para brindar la asistencia médica necesaria y trasladar al niño al centro hospitalario adecuado.
Ante este tipo de situaciones, es fundamental que los padres y cuidadores mantengan una constante supervisión de los niños cuando se encuentran en instalaciones acuáticas, y que los parques acuáticos cuenten con personal capacitado y protocolos de seguridad bien definidos para prevenir y responder eficazmente ante posibles incidentes.
