Cruz Roja Española celebra este 6 de julio 160 años de una trayectoria marcada por su compromiso humanitario en nuestro país. Esta conmemoración resalta el camino recorrido por la organización a lo largo de las décadas, fundamentado en el principio de humanidad que impulsa su labor para prevenir y aliviar el sufrimiento de las personas.
La presidenta de Cruz Roja Española, Mar Pageo, destaca que la relevancia de la organización «no solo se mide por los servicios prestados, sino por la capacidad de adaptarse y evolucionar para abordar los desafíos contemporáneos y futuros». Esto les ha permitido estar siempre al lado de quienes se enfrentan a la vulnerabilidad, acercarse a quienes luchan por sus derechos, tender la mano a los más solos y tener presente que la crisis climática y ambiental es una amenaza a la supervivencia de la humanidad.
UNA HUELLA IMBORRABLE EN MOMENTOS CLAVE
Cruz Roja Española forma parte del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, y su misión principal es prevenir y aliviar el sufrimiento humano. A lo largo de sus 160 años, ha dejado una huella imborrable en hitos históricos, como conflictos bélicos, desastres naturales, crisis migratorias y sanitarias.
Eventos como las inundaciones de Valencia en 1957, el terremoto en Lorca, el volcán de La Palma o el Huracán Mitch en Centroamérica han sido escenarios donde Cruz Roja ha intervenido con su labor humanitaria. Estas experiencias han supuesto un cambio en la forma de trabajar la cooperación internacional, adaptándose a los desafíos contemporáneos.
Tras la batalla de Solferino, que inspiró a Henry Dunant a crear una organización que brindara asistencia imparcial a los heridos, España fue uno de los primeros países en constituir su propia Sociedad Nacional de la Cruz Roja, el 6 de julio de 1864. Este hito sentó las bases del actual Derecho Internacional Humanitario.
UNA LABOR QUE HA TRANSFORMADO VIDAS
A lo largo de su historia, Cruz Roja Española ha ampliado su campo de acción más allá de los conflictos bélicos, abordando diversas situaciones de vulnerabilidad. Desde atender a niños y niñas enfermas, adolescentes que sufren acoso, personas solas, sin hogar, con enfermedades crónicas o mujeres víctimas de violencia, la organización ha curado heridas físicas y del alma, creado redes de apoyo, devuelto la esperanza y transformado vidas.
La presidenta de Cruz Roja Española, Mar Pageo, concluye que la organización «siempre ha estado ahí, y seguirá estando, para aliviar el dolor y dignificar la vida«. Este compromiso inquebrantable con la humanidad es el legado que Cruz Roja Española celebra en sus 160 años de trayectoria, reafirmando su papel clave en la sociedad española.
