José Raúl Mulino asumió la presidencia de Panamá en una ceremonia celebrada en Ciudad de Panamá. Sin la presencia de grandes promesas económicas inmediatas y recordando a su «amigo» y expresidente Ricardo Martinelli, quien lo ayudó a llegar al poder, Mulino se mostró conmovido al recibir la banda presidencial.
El evento se llevó a cabo en un centro de convenciones, sin mayores problemas a excepción de un leve retraso debido a la juramentación previa de los nuevos diputados en el Parlamento. Mulino, un veterano político de 65 años, recibió la banda presidencial, diseñada por el sastre colombiano Luis Sebastián Delgado, conocido por haber creado también la banda de la expresidenta Mireya Moscoso.
Presencia del rey Felipe VI
El rey de España, Felipe VI, destacó entre los asistentes a la ceremonia, subrayando la importancia de las relaciones internacionales y el apoyo de España a la nueva administración panameña.
Su presencia, junto con la de otros mandatarios latinoamericanos como Gustavo Petro de Colombia y Rodrigo Cháves de Costa Rica, añadió un notable peso diplomático al evento.
En su primer discurso, Mulino prometió gobernar con base en el amor, destacando: «El amor siempre vence al odio». También expresó que su «gran sueño» era convertirse en presidente de Panamá. Sin embargo, el nuevo mandatario no tardó en mostrar su carácter de «mano dura» al abordar los desafíos que enfrentará su gobierno, especialmente la economía panameña.
Mulino enfatizó la difícil situación económica del país y criticó al gobierno saliente por duplicar la deuda pública, señalando que gran parte de ella se destinó a gastos operativos en lugar de inversiones que generen empleo y soluciones a largo plazo. Prometió que todas las acciones de su administración generarán «chen chen», eslogan de su campaña que significa «dinero en los bolsillos».
Promesas de Mulino
Entre las promesas más significativas de Mulino destaca la construcción de un tren que conectará Ciudad de Panamá con David, cerca de la frontera con Costa Rica. Además, anunció planes para reactivar la economía mediante obras públicas, creación de empleo juvenil y construcción de viviendas. La economía panameña ha sido afectada por la crisis hídrica en el Canal de Panamá y el cierre de la mina Cobre Panamá, operada por First Quantum Minerals.
Apoyo internacional
La investidura de Mulino contó con la presencia de dignatarios internacionales, incluyendo al rey de España, Felipe VI, y los presidentes de Colombia y Costa Rica, Gustavo Petro y Rodrigo Cháves, respectivamente.
La asistencia de Felipe VI subraya la relevancia de la relación bilateral entre España y Panamá, así como el apoyo y la cooperación internacional que espera recibir el nuevo gobierno.
Inmediatamente después de asumir el cargo, Mulino firmó un memorando de entendimiento con Estados Unidos para abordar la crisis migratoria en la selva del Darién, comprometiendo a EE.UU. a cubrir los gastos de repatriación de migrantes.
José Raúl Mulino comienza su mandato con grandes expectativas y desafíos por delante, especialmente en términos económicos y sociales, con la promesa de poner a Panamá en un camino de prosperidad y estabilidad, contando con el respaldo y la observación de la comunidad internacional.
