Felipe VI, el actual rey de España, siempre ha tenido una relación compleja con sus dos hermanas, Elena y Cristina. Nacidos el siguiente orden, Elena fue la primera en llegar al mundo, seguida por Cristina y finalmente Felipe. Sin embargo, la preferencia masculina establecida en la Constitución Española, una decisión impulsada por el rey Juan Carlos, garantizó que Felipe ascendiera al trono, y no la hija mayor.
1La cercanía entre Felipe VI y su hermana Cristina era notable
Según el periodista Jaime Peñafiel, esta elección no solo se debió a la primogenitura masculina, sino también a que se consideraba que Elena no tenía las condiciones intelectuales adecuadas para reinar. La discriminación de género en la sucesión sigue siendo un tema controversial y un reflejo de una Constitución que muchos consideran anticuada y vergonzosa.
La relación entre Felipe VI y sus hermanas ha sido marcada por altibajos, siendo particularmente interesante su conexión con Cristina. A pesar de que la diferencia de edad entre Felipe y sus hermanas es mínima, pues solo se lleva tres años con Cristina y 4 años con Elena, su vínculo con Cristina siempre fue más cercano. Se decía que tenían caracteres más similares y una afinidad natural que los acercaba desde pequeños.
Pilar Eyre, en su blog en Lecturas, ha escrito sobre cómo Felipe y Cristina eran más que hermanos; eran íntimos amigos. La reina Sofía los llamaba cariñosamente Zipi y Zape, en referencia a los traviesos gemelos de los cómics.
