El Banco Central Europeo (BCE) impondrá metas climáticas a las empresas en las que tiene activos y tomará «medidas de corrección» si no se cumplen estos objetivos, anunció la institución.
«Se deben fijar objetivos […] para monitorear la trayectoria de reducción de las emisiones de las empresas de la cartera de activos» del BCE, indicó un comunicado del banco.
Si «se detectan desviaciones con respecto a la trayectoria deseada, se evaluarán medidas correctivas caso por caso», añadió.
Estas medidas no se implementarán «hasta dentro de varios meses», según un portavoz del banco central.
Sin embargo, el BCE no detalló las posibles sanciones en caso de incumplimiento.
Antes de endurecer su política monetaria frente a la inflación, incrementando sus tipos de interés, el BCE lideró una firme política de compra masiva de activos para apoyar la economía, especialmente durante la pandemia de coronavirus.
La institución todavía posee una reserva de unos 350.000 millones de euros (375.000 millones de dólares) en bonos de empresas de diversos sectores, incluyendo algunos contaminantes.
Desde 2021, el BCE ha decidido integrar más activamente la lucha contra el cambio climático en sus decisiones de política monetaria y lanzó un proyecto para limitar el impacto ambiental de su cartera de activos.
1Prioridades para el BCE
El banco ahora da prioridad a las empresas que emiten menos gases de efecto invernadero al renovar títulos que están por expirar.
Esta estrategia ha resultado efectiva: «una quinta parte de la reducción total de las emisiones de las empresas de la cartera del eurosistema en 2022 y 2023 se debió a los esfuerzos» del BCE para reinvertir en sectores menos contaminantes.
En noviembre de 2020, la institución publicó un conjunto de recomendaciones para que los bancos identifiquen y gestionen los riesgos climáticos y medioambientales en su gobernanza, estrategia y gestión global de riesgos.
Además, amenazó con «sanciones financieras» a las entidades financieras que no alcancen estos objetivos.
