Recientemente, se dio a conocer un dato con un gran impacto negativo en toda España. Y es que nuestro país salió del ‘top 10’ mundial de los destinos más propicios para invertir en renovables. Este dato es desalentador debido a que es la primera vez desde la pandemia que el país no logra posicionarse entre las diez mejores naciones del Índice de Atractivo País para Energías Renovables que actualiza de forma bianual la consultora EY.
Desde la edición previa a este estudio, el mercado de España cayó cuatro posiciones, hasta el puesto 12, dando así su peor registro desde noviembre de 2019. Los tres primeros en la lista son Estados Unidos, China y Alemania, que normalmente intercambian la segunda y tercera posición. Luego, lo siguen Dinamarca, Canadá, Japón y Países Bajos, donde se han adelantado al mercado español desde la pasada edición.
La razón de esta salida de España para las inversiones de energías renovables
Los últimos seis meses para España en cuanto a inversión en renovables, no ha sido para nada bueno. Con la llegada de la pandemia, una gran cantidad de alianzas y compraventas de proyectos de energías limpias posicionó a España como un mercado propicio en transacciones verdes. Los precios subían y los planes del Gobierno y de Bruselas podían contemplar el gran despliegue acelerado de miles de megavatios renovables en una década. Una etapa muy buena para el territorio nacional.
Pero este año la volatilidad de precios trajo consecuencias severas. La incertidumbre de que faltan redes eléctricas para absorber la nueva capacidad verde y, sobre todo, una faltante de indicios de que la demanda, arrastra un gran freno de esta industria desde el parón del COVID. «Las restricciones de producción (curtailment) y las congestiones de la red son los principales fenómenos que retrasan la inversión. La congestión cada vez es más frecuente, lo que pone de manifiesto la importancia de la inversión en baterías y almacenamiento», explicó el informe de la “big four”.
dando así su peor registro desde noviembre de 2019.
¿Qué son las restricciones de producción?
Las restricciones de producción o el llamado ‘curtailment’ son las órdenes que el sistema le brinda a los generadores para que paren la producción cuando hay más oferta que demanda. El año pasado, estas situaciones se elevaron a niveles no registrados desde 2014. «Para los inversores ha sido un anticipo de lo que se puede esperar del sistema eléctrico español a medio plazo», remarcó una fuente del sector de energías renovables.
Cabe destacar que entre 2021 y 2022, se superaron las 240 operaciones corporativas anuales en el sector energético, dónde llegó a ser un máximo histórico para el país. Pero en 2023 cayó considerablemente el ritmo de compraventas, pero aumentó el valor, en sectores como el eólico y solar acaparando el 80% del importe total de todas las transacciones, de acuerdo con las cifras proporcionadas por TTR Data.
