La Junta de Andalucía rescata 70 crías de aguilucho cenizo en Huelva para preservar la especie en 2024

El aguilucho cenizo es un ave rapaz de tamaño medio catalogada como vulnerable. Esta especie se asienta en el Valle del Guadalquivir, utilizando los cultivos de cereales como su principal hábitat de cría. En la provincia de Huelva, los espacios preferidos por el aguilucho cenizo para su reproducción son los cultivos de trigo de secano, especialmente en fincas de pequeñas dimensiones de la campiña. Además, en Huelva existen colonias de aguilucho cenizo en marismas.

De manera tradicional, el aguilucho cenizo se distribuye en la provincia de Huelva en diversos municipios, como Paterna del Campo, Escacena del Campo, Villalba del Alcor, Almonte, Hinojos, San Juan del Puerto, Trigueros, Huelva, Aljaraque, Cartaya, Lepe y Ayamonte. Incluso, desde hace siete años, el Programa específico de la especie alcanza a las poblaciones de los parajes naturales Marismas del Odiel, Marismas del Isla Cristina, Marismas del Río Piedras y la Flecha del Rompido, así como al Espacio Natural de Doñana.

La Campaña de Conservación del Aguilucho Cenizo en Huelva

El dispositivo provincial de Huelva para la conservación de esta especie vulnerable ha conseguido salvar aproximadamente 70 pollos volantones en la campaña de 2024. El delegado de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta en Huelva, Pedro Yórquez, ha destacado que el trabajo del dispositivo con recursos imprescindibles y la abundante lluvia han sido clave para esta alta productividad de la campaña.

En la parte onubense de la comarca Campo de Tejada se han instalado 28 nidos, de los cuales 22 se encuentran en Escacena del Campo y 6 en Villalba del Alcor. El total de nidos en la provincia de Huelva asciende a 57, incluyendo también los que se han ubicado en San Juan del Puerto, Trigueros, Villarrasa y el Paraje Natural Marismas del Odiel.

En cuanto al número de pollos, se han contabilizado 68 a la espera de conocer el registro en Marismas del Odiel para realizar el balance definitivo de esta campaña, que comenzó a principios de abril con la localización de las colonias.

La Colaboración Clave para la Conservación

El operativo en Huelva del Programa está formado por técnicos de la Junta de Andalucía, Agentes de Medio Ambiente, personal de la Agencia de Medio Ambiente y Agua (AMAYA) y responsables de la Asociación Ecologista Ituci Verde, siendo esta última un agente activo en el Campo de Tejada.

Además, el delegado territorial ha resaltado la importancia de la colaboración de los agricultores, sin cuyo compromiso sería imposible aplicar este Programa. En este sentido, destaca especialmente la aportación de la Sociedad Cooperativa Andaluza Campo de Tejada, que atiende todas las indicaciones y sugerencias del dispositivo.

El equipo de Agentes de Medio Ambiente se encarga de contactar con los propietarios, los responsables de las cooperativas y los cosechadores para conocer cuándo iniciarán exactamente la campaña de cosecha del trigo y prevenir así la destrucción de los nidos. De hecho, la actuación que mayor número de nidos exitosos ha aportado a lo largo de los años de seguimiento es el retraso de la cosecha.

Incluso, la agricultura se beneficia del Programa de Seguimiento y Conservación del Aguilucho Cenizo, ya que esta especie permite el control de plagas para el cereal al alimentarse de cigarras y pequeños roedores, además de mantener fuera de los campos de cereal las bandadas de otras aves que se alimentan del trigo. Por lo tanto, el aguilucho cenizo actúa de espantapájaros y ‘espantarroedores’ activo.

En resumen, la conservación del aguilucho cenizo en Huelva es el resultado de un esfuerzo conjunto entre diversas entidades y organizaciones, donde la colaboración de los agricultores y el uso de nuevas tecnologías juegan un papel fundamental para proteger esta especie vulnerable y mantener el equilibrio del ecosistema.