Adara Molinero, protagonista indiscutible de Supervivientes All Stars, nos dejó en la noche del domingo una muestra clara de su estrategia y necesidad de ser el centro de atención.
Recordemos el famoso cuento de Pedro y el lobo: Pedro se divierte engañando a la gente de su pueblo diciendo que viene el lobo cuando en realidad no es así. Al final, cuando el lobo realmente aparece, nadie le cree y todo termina en desgracia. Con Adara Molinero, aunque sin desgracia, la situación es similar.
2Un cambio notable en tan solo tres días
En su regreso, pareció otra persona. Sus compañeros, al verla entrar en la palapa, no podían creer la transformación. La paciencia de ‘Supervivientes All Stars’ con ella, que recibió hasta un mensaje de su novio antes de tomar su decisión, es algo pocas veces visto. Pero eso es precisamente lo que Adara necesitaba: ser la estrella, el centro de atención.
El enfrentamiento con sus compañeros, especialmente con Marta Peñate, mostró otra faceta de Adara. Mientras Peñate y otros participantes, como Olga, Abraham y Lola, señalaban las diferencias en las condiciones de su participación, Molinero lo llevó a un terreno personal. La acusación de Peñate sobre las ventajas que Adara tenía no era infundada, mientras sus compañeros soportaban condiciones duras, Molinero había estado en mejores condiciones.
