Las organizaciones sindicales han convocado una huelga de 24 horas en los distintos centros de trabajo del Grupo FerroGlobe para el próximo miércoles, 26 de junio, debido a la negativa de la empresa a negociar una subida salarial para 2023 y a efectuar un incremento salarial vinculado al IPC.
La postura inicial de FerroGlobe y críticas sindicales
Los sindicatos Unión General de Trabajadores (UGT), Confederación Intersindical Galega (CIG), Comisiones Obreras (CCOO), Unión Sindical Obrera (USO) y Sindicato Unitario (SU) han señalado su intención de llevar a cabo un paro de 24 horas en todas las plantas de España del grupo este próximo miércoles. Desde UGT FICA critican que, después de 16 reuniones y más de un año y medio de negociación, la dirección sigue «estancada» en la línea de salida.
La mediación en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) para intentar desbloquear la negociación del acuerdo y desconvocar la huelga volvió a mostrar la postura intransigente de la dirección. FerroGlobe insiste en aplicar un 0% de incremento salarial para 2023 y se niega a aceptar una cláusula de revisión salarial que garantice el poder adquisitivo de los trabajadores.
El ataque a los intereses de los trabajadores y postura sindical
Ante esta situación, los sindicatos mantienen la jornada de movilización prevista para el miércoles. Denuncian la mala praxis empresarial tanto en las formas como en el fondo. Consideran abusivos los servicios mínimos propuestos por la empresa y advierten que, de imponerse, presentarán una demanda por vulneración del derecho a huelga de los trabajadores.
Los sindicatos manifiestan su voluntad de negociar con buena fe para llegar a un acuerdo y evitar el conflicto, pero al mismo tiempo advierten que no aceptarán imposiciones ni condiciones económicas y sociales desfavorables para los trabajadores que la empresa sí aplica para su dirección.
El llamamiento a la acción
La huelga en FerroGlobe se presenta como un último recurso tras largas negociaciones infructuosas y la negativa de la empresa a atender las demandas de los sindicatos. La movilización de los trabajadores es un acto de resistencia ante lo que consideran un ataque a sus intereses y derechos laborales.
Esperamos que esta situación se pueda resolver de manera pacífica y justa para ambas partes, pero queda claro que los sindicatos están dispuestos a llegar hasta el final para defender los derechos de los trabajadores. La solidaridad y la unidad son fundamentales en momentos como este, donde la negociación colectiva y el diálogo deben primar sobre la imposición y la intransigencia.
Esperamos que la presión ejercida por los trabajadores sirva para que FerroGlobe reconsidere su postura y se siente a negociar de manera constructiva y respetuosa. Los trabajadores son el motor de cualquier empresa y su bienestar y dignidad laboral deben ser siempre una prioridad. La lucha por unas condiciones laborales justas es un derecho fundamental que debe ser respetado y garantizado.