El panini de calabacín es una idea excelente para un almuerzo rápido y saludable que se puede preparar en solo 10 minutos. Este plato es una alternativa ligera y nutritiva a los tradicionales paninis de pan, aprovechando las propiedades del calabacín, un vegetal bajo en calorías y rico en nutrientes. Con una combinación de ingredientes sabrosos y sencillos, puedes disfrutar de una comida deliciosa sin sacrificar tu tiempo o tu salud.
Para preparar este panini de calabacín, necesitarás un calabacín, sal, pimienta negra, un poco de aceite de oliva virgen extra (AOVE), tomate frito, huevo duro rallado, queso mozzarella rallado, atún al natural y orégano. La preparación comienza lavando y cortando el calabacín en láminas de aproximadamente 1 cm de grosor. Esto asegurará que las láminas se cocinen de manera uniforme y se mantengan firmes, proporcionando una base perfecta para los toppings.
Preparación del panini de calabacín
Una vez que tengas las láminas de calabacín, es momento de sazonarlas. Salpimienta al gusto y pincela ligeramente con un poco de AOVE. Esto no solo añadirá sabor, sino que también ayudará a que el calabacín se dore ligeramente en el horno. Coloca las láminas en una bandeja para hornear y llévalas al horno precalentado a 180 °C durante unos 10 minutos. Este tiempo es suficiente para que el calabacín se ablande un poco, pero sin perder su textura.
Después de hornear las láminas de calabacín, es hora de añadir los toppings. Extiende una capa de tomate frito sobre cada rodaja, luego espolvorea con huevo duro rallado. Estos ingredientes no solo añaden sabor al panini de calabacín, sino que también aportan una buena dosis de proteínas y otros nutrientes esenciales. A continuación, añade una cantidad generosa de queso mozzarella rallado, que se fundirá perfectamente en el horno, creando una capa dorada y crujiente.
Una opción para dietas keto o paleo
El toque final lo da el atún al natural, que se distribuye de manera uniforme sobre el queso. El atún es una excelente fuente de proteínas y ácidos grasos omega-3, lo que hace que el panini de calabacín sea aún más nutritivo. Finalmente, espolvorea un poco de orégano para darle un aroma y sabor adicionales. Vuelve a colocar las rodajas en el horno y hornéalas hasta que el queso esté gratinado y burbujeante.
Otra ventaja del panini de calabacín es su versatilidad, permitiendo experimentar con diferentes ingredientes y toppings según tus preferencias o lo que tengas en casa. Por ejemplo, puedes sustituir el tomate frito por salsa pesto, añadir rodajas de champiñones, pimientos, aceitunas o incorporar hierbas frescas como albahaca o perejil. Para un toque más intenso, prueba con quesos como cheddar o parmesano, o agrega un poco de jalapeño o salsa picante para un extra de sabor. Esta flexibilidad no solo lo hace interesante y variado, sino que también lo adapta a diversas dietas, como la keto o paleo, y es una excelente manera de incorporar más vegetales en la alimentación de los niños.