Los vellos encarnados son un problema común que millones de personas en todo el mundo experimentan y hay un error que se suele cometer. Aunque muchos suelen resolver esto desde casa y con métodos muy rudimentarios, la verdad es que se trata de una afección que hay que tratar con mucho cuidado, ya que de lo contrario podría traer graves consecuencias de la salud.
Estos vellos encarnados suelen presentarse en zonas como las axilas, las ingles, piernas y el área púbica, sin embargo es posible que aparezcan en cualquier área. Aunque pueden ser molestos y dolorosos, es muy importante evitar cometer errores que pongan en riesgo nuestro bienestar. Aquí te diremos cuáles son esos errores que jamás debes cometer cuando este problema se presenta en tu piel.
El error que debes evitar si tienes un vello encarnado
Cuando un vello queda encarnado en la piel, es común sentir molestias que van desde el escozor hasta el dolor, pero es muy importante tener control sobre esto y no rascar o manipular el área, debido a que no solo genera daño en la piel, sino que puede provocar una infección o empeorar la lesión con mayor inflamación. Por el contrario, intenta limpiar muy bien el área y desinfectar cada cierto tiempo.
Otro dato importante a tomar en cuenta es el uso de exfoliantes, si bien estos son recomendados para evitar que los vellos queden enquistados, no es recomendable cuando el problema ya se encuentra activo, debido a que puede empeorar el dolor, irritar la piel y aumentar el riesgo de infección. Igualmente, es indispensable evitar sacar el pelo con pinzas y otro objeto punzante, esto puede dañar gravemente la piel y facilitar el ingreso de bacterias en la herida.
Evita cualquier error y cuida tu piel de los vellos encarnados
Una de las principales recomendaciones para evitar los vellos encarnados es exfoliar la piel regularmente. Realizar exfoliaciones de dos a tres veces por semana puede ayudar a eliminar las células muertas y evitar que el pelo quede enquistado. Además, es necesario cuidar la forma en cómo nos rasuramos, la recomendación siempre es afeitarse con dirección al crecimiento del pelo para evitar que este crezca a una dirección equivocada.
En caso de presentar el problema, es importante utilizar productos antibacterianos que puedan reducir el riesgo de infección y ayuden a mantener el área limpia. También es recomendable usar compresas calientes en el área que puedan ayudar a ablandar la piel y así facilitar la salida del pelo. En caso de que el pelo sea visible, puede extraerse con facilidad, siempre y cuando utilicemos una aguja esterilizada.
