Descubre cómo preparar unos polos de hielo con solo 3 ingredientes y sin molde. Este postre es perfecto para refrescarte durante el verano y es increíblemente fácil de hacer. Lo mejor de todo es que puedes personalizarlo con tu galleta o chocolate favorito. En este caso, la receta opta por Oreo, M&M y Kinder Bueno para ofrecerte algunas deliciosas opciones. Con solo unos pocos pasos, tendrás listas unas paletas caseras que seguramente se convertirán en las favoritas de todos en casa.
Para comenzar a realizar estos polos de hielo, selecciona tu galleta o chocolate favorito y tritúralo directamente en su empaque. Esto hará que la preparación sea más sencilla y evitará ensuciar demasiados utensilios. Puedes hacerlo con un rodillo o simplemente aplastándolo con las manos. Este proceso es ideal para mantener los trozos de galleta o chocolate dentro del empaque, asegurando una distribución uniforme cuando agregues los otros ingredientes. En este ejemplo, se utilizan Oreo, M&M y Kinder Bueno, pero siéntete libre de experimentar con lo que más te guste.
Preparación de los polos de hielo
El siguiente paso es preparar la base. Para esto, necesitas 2 tazas de leche evaporada y leche condensada al gusto. La combinación de estos dos ingredientes creará una mezcla cremosa y deliciosa que complementará perfectamente los trozos de galleta o chocolate. Mezcla bien ambos ingredientes en un bol hasta obtener una consistencia homogénea. Esta base será lo que le dé el sabor y la textura cremosa a tus polos de hielo.
Una vez que tengas lista la mezcla, viértela dentro del empaque donde previamente trituraste las galletas o chocolates. Asegúrate de que cada empaque esté bien lleno y que los trozos de galleta o chocolate estén distribuidos uniformemente. Este paso es crucial para que cada bocado de la paleta tenga un sabor consistente y delicioso. La mezcla de la leche evaporada y la leche condensada se encargará de unir todos los ingredientes, creando unos polos de hielo perfectos.
Llevar al congelador y listos para disfrutar
Ahora, coloca unos palitos de paleta en cada empaque. Es importante que los palitos queden bien centrados para que sea fácil sostener los polos de hielo una vez que estén congeladas. Coloca los empaques con las paletas en un tupper o recipiente similar, asegurándote de que queden bien parados para evitar que la mezcla se derrame. Lleva el tupper al congelador y déjalo allí por unas 3 horas o hasta que los polos de hielo estén completamente duras.
Después de unas horas en el congelador, tus polos de hielo estarán listos para disfrutar. Este método sencillo y sin necesidad de moldes especiales te permitirá crear un postre casero delicioso con el mínimo esfuerzo. Además, puedes personalizarlo tantas veces como quieras, probando diferentes combinaciones de galletas y chocolates. ¡Prepáralas y sorprende a tu familia y amigos con estos deliciosos polos de hielo caseros!
