La Generalitat de Cataluña ha presentado recientemente dos proyectos clave para hacer frente a los retos demográficos que enfrenta la región. Por un lado, se propone un nuevo modelo de viviendas con servicios para personas mayores que vivan en residencias poco adaptadas a sus necesidades. Por otro, se ha desarrollado un plan de planificación territorial de los servicios sociales especializados hasta el año 2040.
Estos programas tienen como objetivo ofrecer una respuesta adecuada al envejecimiento de la población, el aumento de las necesidades de cuidados y la emancipación de los jóvenes. La estrategia de las viviendas se basa en la construcción de alojamientos para personas mayores que pongan sus pisos actuales a disposición de alquileres garantizados para jóvenes u otros colectivos. De esta manera, se busca retrasar la institucionalización de la gente mayor y aprovechar los recursos públicos de manera más eficiente.
NUEVO MODELO DE VIVIENDAS CON SERVICIOS PARA PERSONAS MAYORES
Según el conseller de Derechos Sociales, Carles Campuzano, es necesario anticiparse a las necesidades futuras con fórmulas que permitan a las personas mayores permanecer en sus hogares durante más tiempo. Se estima que para el año 2030, la población de más de 65 años pasará del 20% al 30%, lo que representa un importante reto demográfico. Con el modelo de «alojamiento con soporte», se busca dar una respuesta más adecuada a esta realidad.
La consellera de Territorio, Ester Capella, ha destacado el aumento de la población mayor y el «preocupante incremento continuo» de la edad de emancipación de los jóvenes. Este programa de viviendas permitirá movilizar más unidades y generar beneficios tanto para las personas mayores como para los jóvenes. La primera fase contempla la construcción de 800 nuevos pisos para personas mayores en 10 municipios, lo que a su vez generará 800 viviendas para jóvenes.
PLANIFICACIÓN DE SERVICIOS SOCIALES ESPECIALIZADOS 2030-2040
En cuanto a la planificación de los servicios sociales especializados, el conseller Campuzano ha señalado que será necesario crear 47.000 nuevas plazas en las próximas décadas para atender a personas mayores, con discapacidad, problemas de salud mental, drogadicciones y con VIH-Sida. Para ello, se prevé llegar a un parque público de más de 126.000 plazas en 2040, lo que requerirá de un cambio en el modelo y un debate sobre la mejor manera de garantizar una atención adecuada a la ciudadanía.
Dentro de este plan, se contempla sumar 2.600 plazas en el ámbito de la salud mental, 650 para drogadicciones y unas 250 para personas con VIH-Sida. Para hacer frente a este incremento, se calcula un gasto anual por parte de la Generalitat de unos 600 millones de euros hasta 2030, y una partida que debería incrementarse en 280 millones más de cara a 2040.
COLABORACIÓN CON ENTES LOCALES Y EL TERCER SECTOR
Tanto el modelo de viviendas como la planificación de los servicios sociales especializados se llevarán a cabo en colaboración con los entes locales y el tercer sector. Esto permitirá aprovechar los recursos y las capacidades de los diferentes actores involucrados, lo que se traduce en una mayor eficiencia y efectividad de los programas.
La Generalitat de Cataluña está demostrando su compromiso con el bienestar de la población, especialmente de los colectivos más vulnerables. Estas iniciativas, que abordan tanto el aspecto habitacional como los servicios sociales, son clave para hacer frente a los desafíos demográficos que se avecinan y garantizar una atención de calidad a todos los ciudadanos.
