El líder norcoreano Kim Jong Un reafirmó el apoyo incondicional de Corea del Norte a la guerra de Rusia en Ucrania.
Durante la visita de Estado del presidente ruso Vladimir Putin a Pyongyang, ambos mandatarios firmaron un tratado de asociación estratégica que incluye asistencia mutua en caso de agresión.
Putin, que lo esperaban con una gran ceremonia en el aeropuerto de Pyongyang, fue recibido por Kim Jong Un en un ambiente decorado con banderas y retratos de ambos líderes. En una declaración conjunta, Putin destacó que el tratado firmado contempla, entre otros aspectos, la cooperación militar-técnica y la ayuda recíproca en caso de ataque.
El encuentro llega en un contexto de creciente aislamiento diplomático para Rusia, tras su invasión a Ucrania, y continuas sanciones internacionales contra Corea del Norte debido a su programa nuclear.
Este acercamiento entre Moscú y Pyongyang ha despertado preocupación en las potencias occidentales, quienes acusan a Corea del Norte de suministrar armamento a Rusia.
Kim Jong Un celebró lo que denominó una «nueva era» en las relaciones bilaterales, expresando su pleno apoyo a la ofensiva rusa en Ucrania.
Calificó el tratado de asistencia mutua como una medida defensiva y destacó la amistad entre ambos países. Por su parte, Putin agradeció el respaldo constante de Corea del Norte y sugirió que las sanciones contra Pyongyang deberían ser reconsideradas.
1Relación histórica que reafirmó Putin
El tratado refuerza una relación histórica que se remonta al final de la Guerra de Corea (1950-1953). Desde el inicio del conflicto en Ucrania en febrero de 2022, las relaciones entre ambos países han cobrado una nueva importancia estratégica.
Putin fue recibido en la plaza Kim Il Sung de Pyongyang con una fastuosa ceremonia que incluyó una banda militar y un espectáculo de danza sincronizada, reflejando la importancia de la visita.
Los líderes sostuvieron una reunión, su segundo encuentro en menos de un año, tras la visita de Kim a Rusia en septiembre pasado.
Analistas como Koh Yu-hwan, profesor emérito de estudios norcoreanos en la Universidad de Dongguk, señalan que esta cooperación es mutuamente beneficiosa: Rusia necesita apoyo en armamento debido a la prolongada guerra en Ucrania, mientras que Corea del Norte busca alivio en sus necesidades de alimentos, energía y tecnología militar avanzada en medio de la presión de las sanciones internacionales.
Este nuevo capítulo en la relación entre Corea del Norte y Rusia representa un desafío significativo para la comunidad internacional, que observa con cautela el fortalecimiento de estos lazos estratégicos en un momento de tensiones globales.