Los países del G7 manifestaron su descontento con la decisión de Venezuela de retirar la invitación a la Unión Europea (UE) para observar las elecciones presidenciales programadas para el 28 de julio.
En un borrador de la declaración final de la cumbre, se expresaron preocupaciones sobre los derechos de la oposición y la exclusión de la misión europea de observación.
«Nos preocupa profundamente la situación de los derechos de la oposición en el proceso electoral y la decisión de retirar la invitación para una misión de observación electoral de la UE», señala el documento.
La Cancillería venezolana rechazó la declaración, mientras que la líder opositora María Corina Machado, inhabilitada para participar en los comicios, apoyó el pronunciamiento del G7.
Machado, que respalda al diplomático Edmundo González como su sustituto, agradeció el apoyo del grupo a la democracia y a unas elecciones libres y justas en Venezuela.
1Respuesta de Venezuela al G7
En contraste, el canciller venezolano, Yván Gil, criticó al G7 en la red social X, calificando a sus líderes de «decadente imperialismo» y acusándolos de interferir en asuntos internos de Venezuela con prácticas coloniales.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, controlado por el oficialismo, anunció en mayo la exclusión de la misión de observación de la UE del proceso electoral.
Esta medida se tomó después de que la UE mantuviera sanciones contra unos 50 funcionarios venezolanos, alegando una actitud hostil por parte del bloque europeo.
El G7, integrado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, también instó a Caracas a garantizar elecciones competitivas e inclusivas y a cesar el acoso a la oposición, además de exigir la liberación inmediata de todos los presos políticos.
La cumbre anual del G7 se celebra en el lujoso resort de Borgo Egnazia, en la región de Apulia, al sur de Italia, reuniendo a líderes mundiales para abordar diversas cuestiones internacionales.