Zarzuela es el epicentro de las decisiones que dirigen la vida de Leonor, la futura reina de España. En su vida Leonor enfrenta dos fechas muy importantes: su mayoría de edad y, más trascendental aún, el día que se convierta en reina debido a la abdicación o fallecimiento de Felipe.
Solo en el momento en que Leonor llegue al trono, podrá mostrar su verdadero potencial, un potencial que ahora está encadenado por una Casa Real a la antigua, temerosa y desconectada de la realidad. Cada decisión que toma Zarzuela y que no puede tomar ella, parece perjudicar su imagen y su futuro.
2La foto perfecta que no existió
Pareciese algo contradictorio cuando Zarzuela invita a Leonor al acto de Constitución de las Cortes, elegidas por sufragio universal, pero al mismo tiempo le prohíben participar en la «fiesta de la democracia» durante cada jornada electoral. Ayer, domingo 9 de junio, Leonor debería haber podido ejercer su derecho al voto, pero Zarzuela decide que no es lo mejor para ella. De haber sido así, se habría dado una oportunidad perfecta para una foto emblemática: Leonor votando y legitimando la democracia. Sin embargo, Zarzuela insiste en vivir en una realidad diferente, ajena a las dinámicas democráticas.
La gestión de la imagen de Leonor en esta monarquía que se pretende más democrática ha quedado al descubierto, especialmente cuando se hace la comparación con la foto de la princesa Elisabet de Bélgica y sus hermanos, todos votando juntos en Bruselas.