Víctimas de abusos sexuales en la Iglesia se concentrarán frente al Congreso de los Diputados el 11 de junio para exigir la tramitación urgente de la ley catalana de imprescriptibilidad de los delitos de pederastia. Esta propuesta de ley, aprobada por el Parlament de Cataluña en febrero, busca que los delitos de abuso sexual infantil de mayor gravedad no prescriban nunca, mientras que el resto lo hagan cuando la víctima cumpla 50 años.
Esta movilización, encabezada por rostros conocidos como Laura Calzada y Jordi de la Mata, protagonistas del documental «La Huida», y Miguel Hurtado, del documental «Examen de Conciencia» y primer denunciante del caso de pederastia de la Abadía de Montserrat, busca presionar al gobierno para que la ley sea tomada en consideración por el pleno del Congreso antes del verano.
La urgencia de proteger a las víctimas y garantizar la no repetición
Las víctimas denuncian la pasividad del gobierno y la falta de interés por parte del Ministerio de Justicia en abordar esta problemática. Mientras tanto, los abusadores se amparan en la prescripción de los delitos para eludir su responsabilidad penal. Como señala Laura Calzada, su abusador «vive un retiro dorado, porque sabe que los delitos que cometió durante décadas van a quedar impunes porque han prescrito».
La prescripción de los delitos de pederastia no solo beneficia a los abusadores, sino que también perpetúa la impunidad y el silencio en torno a estos casos. Para Jordi de la Mata, «la prescripción de los delitos de pederastia es la mejor aliada de los abusadores y encubridores para seguir yéndose de rositas y la bestia negra de las víctimas».
La aprobación de la ley catalana supone un paso importante en la lucha contra la pederastia, pero es fundamental que el Congreso de los Diputados actúe con la misma urgencia y determinación. Miguel Hurtado recuerda que «no puede haber reparación de las víctimas, sin garantías de no repetición» y exige al PSOE y a Sumar que «aceleren» la tramitación de la ley, recordando que «el Parlament de Cataluña escuchó la voz de las víctimas y tramitó la ley de urgencia».
La sociedad española demanda justicia para las víctimas de abusos sexuales en la infancia y medidas contundentes para prevenir y perseguir estos delitos. La imprescriptibilidad de los delitos de pederastia es un reclamo social inaplazable que requiere de una respuesta política a la altura.