Cuál es el misterio que el FBI nunca pudo resolver y que causa escalofríos aún hoy

El misterio del FBI que nunca logró resolver llegó a Netflix. Aunque parece una realidad guionada, este caso de misterio conmocionó al mundo y logró despistar a la Organización que, al día de hoy, no se explica qué sucedió con este caso.

La historia cuenta la hazaña de Dan Cooper, quien logró secuestrar un avión, pedir miles de dólares y escapar sin dejar ni un solo rastro. Aunque hubo sospechosos en todos estos años, el FBI no logró dar con la identidad de este sujeto que se convirtió en el protagonista de un relato macabro.

La historia de Dan Cooper, el misterio que el FBI no logró desentrañar

Todo comenzó en noviembre de 1971 cuando Dan Cooper viajaba en la parte trasera de un avión. Este hombre, de apariencia normal, llamó a una azafata de a bordo y le mostró una bomba que traía en su maletín. Lo que le pedía era simple: quería 200 mil dólares y cuatro paracaídas, designio que fue rápidamente concedido por las autoridades de la aeronave.

Después de aterrizar en Seatle Cooper realizó el intercambio de los 36 pasajeros por el dinero y los paracaídas y le ordenó a los pilotos que volaran hacia Reno en Nevada. Una vez allí, le pidió a la tripulación que se metieran a la cabina y cerraran con seguro. Lo cierto es que, después de aterrizar en esa ciudad y salir de la cabina, los tripulantes se encontraron con lo inesperado: Cooper no estaba y la escalera estaba extendida. Al parecer, el hombre misterioso saltó en la noche y huyó para nunca más ser visto.

Las teorías sobre el misterio de Cooper

Las teorías sobre el misterio de Cooper


Una vez que el caso se dio a conocer, las teorías sobre lo que había sucedido con Dan Cooper comenzaron a correr. La plataforma Netflix fue la que se encargó de llevar esta historia a la ficción con la serie “D.B. Cooper: ¿dónde estás?” que hace un raconto de lo que podría haber sucedido con el misterioso hombre que provocó las más diversas especulaciones.

Geoffrey Gray, autor del libro Skyjack: The Hunt for D.B Cooper fue quien también se dedicó a recopilar testimonios de este caso y el que sacó a la luz algunas de las teorías más diversas. Entre las diferentes hipótesis, se asegura que en realidad Cooper no existió y que el que cometió el ilícito fue Robert Rackstraw, un veterano de Vietnam y antiguo piloto que también podría haber trabajado para la CIA.