No todos los lugares son aptos para seres humanos y en el mundo existen sitios en los que es imposible entrar. Son lugares misteriosos, recónditos, llenos de vegetación y animales salvajes que las personas no se atreverían a explorar.
La isla Surtsey en Islandia, La bóveda global de semillas en Svalbard y Área 51 son algunos de los lugares no tan populares pero misteriosos que esconden los más inesperados secretos y que, por el momento, están prohibidos para visitar, explorar y conocer.
Por qué no se puede ingresar a estos tres lugares
Los motivos por el que no se pueden conocer estos tres lugares son diversos y revisten de explicaciones científicas y misterios. La primera en la lista es la isla Surtsey de Islandia, considerada la más joven del mundo. Este sitio se formó en 1963 debido a una erupción volcánica submarina. A pesar de su belleza, este maravilloso sitio está prohibido para los turistas porque los científicos quieren que haya intervención humana. El motivo es que los investigadores quieren estudiar la evolución de la vida en su ecosistema natural sin interferencias humanas.
La bóveda global de semillas en Svalbard, Noruega, es un misterioso lugar escondido en el Ártico. Esta instalación tiene un objetivo noble que es la de guardar semillas de todo el mundo para en caso de una catástrofe global, se pueda salvar a las especies que están preservadas en ese sitio. Por el momento, su acceso está restringido a un grupo selecto de personas. De esta manera, se garantiza la seguridad y pureza de las muestras invaluables que allí se encuentran.
Uno de los lugares más temibles del mundo: Área 51
Área 51 en la zona de Nevada es considerado uno de los lugares más temibles y también más misteriosos del planeta. Esta base militar ha sido objeto de especulaciones y teorías de especulación durante décadas, entre las que se incluyen rumores de OVNIS, tecnologías de avanzada y secretos diversos rodean a este lugar. El acceso es limitado y las historias que ocurren dentro generan temor hasta el más escéptico.
Este establecimiento no tiene buena fama y muchas personas se negaron a trabajar allí. Es por esto, que decidieron cambiarle el nombre para otro más amigable y algunos la bautizaron como «Rancho Paraíso» o «Tierra de los Sueños». Lo cierto es que allí se realizaban pruebas militares y también vuelos de aviones, que podían superar la velocidad y altura que un aeroplano común por lo que, según las versiones, las personas que los divisaban pensaban que eran OVNIS. “Cuando los pasajeros y pilotos de aviones comerciales veían a los aviones supersónicos en acción, gritaban «como locos» y avisaban a la torre de control pensando que era un ovni”, contó un integrante de la base a la BBC.