La meditación es una de las prácticas favoritas para reducir el estrés y la ansiedad de forma natural. Esta es un método milenario que se ha posicionado en todo el mundo y muchos afirman tener beneficios impresionantes en el bienestar físico y mental. Sin embargo, es común escuchar personas que cuestionan esta práctica de modo que no resulta extraño preguntarnos: ¿es verdaderamente efectiva?
La popularidad de la meditación alcanzó la curiosidad de la ciencia, de modo que se han desarrollado estudios enfocados en evaluar sus resultados y estos han revelado poderosos beneficios en el cerebro. Algunos de estos aportes han sido determinantes en la mejoría del estilo de vida de millones de personas en el mundo y aquí te explicaremos por qué.
Así ayuda la meditación al cerebro
Diversos estudios han determinado que la meditación trae beneficios a la red de modo predeterminado, qué es una red cerebral activa cuando nuestra mente divaga sueña o se encuentra en piloto automático. Esta red está asociada con pensamientos negativos, rumiación y estrés. Cuando meditamos, entrenamos a nuestra mente a enfocarse en el momento presente, disminuyendo así la actividad de la red de modo predeterminado y calmando ese ruido mental que puede ser altamente estresante y generar daño emocional.
En este sentido, la meditación puede ayudar a tener mayor claridad mental, menos estrés, mejorar La regulación emocional, incrementar la concentración y la memoria y hasta reducir los dolores crónicos. Además, la meditación genera una disminución en las pulsaciones cardíacas, lo que la convierte en una excelente técnica para reducir los síntomas físicos causados por los episodios de estrés o ansiedad. Este ejercicio es ideal para aplicarlo de forma diaria en la rutina e, incluso, varias veces al día.
¿Cómo debemos iniciar la meditación?
Aunque muchos pueden pensar que necesitan una técnica especializada para llegar a una buena meditación, la verdad es que los efectos positivos de esta práctica pueden obtenerse con formas de meditación simple, lo único necesario será tener constancia y dedicar algunos minutos al día. Ahora bien, algunos tips generales pueden ser de gran ayuda y estos son realmente fáciles de seguir.
La meditación puede iniciar con la técnica de atención plena, que consiste en enfocarte completamente en tu respiración o en las sensaciones físicas que experimentas. Otra forma de meditar es aplicando un mantra y esto se logra repitiendo en tu mente un sonido o frase que te ayude a mantenerte enfocado. También a posible lograr esta práctica haciendo un escaneo corporal, en el cual debes prestar atención a cada parte de tu cuerpo para notar todas esas sensaciones que vives.