La escuela más cara y prestigiosa del mundo existe y se llama Institut Le Rosey. Esta escuela es una de las más exclusivas y distinguidas del mundo y cuenta con los alumnos más ricos de diferentes países.
Este prestigioso lugar se encuentra en Suiza y a ella asisten los hijos de los billonarios quienes quieren tener acceso a una de las educaciones más sobresalientes de todo el planeta, con amenities que pueden asemejarse a la de un spa o un all inclusive.
Cómo es la escuela de los Reyes, la más rica del mundo
La reputación de esta institución es tan grande que mucho la apodaron la “escuela de los reyes” y posee un estricto protocolo educativo y un sistema de internado que los estudiantes deben seguir a rajatabla. El establecimiento fue fundado en 1800 y tiene alrededor de 400 estudiantes los cuales son educados por un sistema de inteligencias múltiples: el enfoque no es sólo académico sino artístico y deportivo. Entre las condiciones imprescindibles para ser parte de la escuela de los reyes, es tener un inglés y francés fluido.
Los estudiantes se despiertan a las 7 de la mañana y deben ordenar su habitación. Luego, tienen un tiempo para desayunar en el amplio bufete y a las 8 en punto deben asistir a clases hasta las 12 PM. Luego del almuerzo, los estudiantes siguen con las clases hasta las 4 de la tarde culminando así la primera etapa del día. Más adelante, a las 7 PM, la instrucción continúa con las academias deportivas y artísticas. Tras esta actividad, la jornada culmina con la cena en la que los estudiantes deben asistir con vestimentas formales.
Mejor que en un hotel: las comodidades de la escuela de los reyes
La escuela de los reyes es tan grande que los alumnos pueden elegir realizar cualquier deporte, incluso esquí. El Institut Le Rosey posee su propia pista de esquí, que los jóvenes disfrutan en la temporada invernal También, puede realizar snowboard y hockey sobre hielo. El campus tiene más de 28 mil metros cuadrados donde los alumnos tienen acceso a su propio lago, el de Ginebra, por lo que los adolescentes pueden practicar también la navegación con vela, remo y esquí acuático.
La cuota mensual de este Instituto es de 133 mil dólares al año y, como requerimiento para formar parte, el establecimiento no permite que más del 10 por ciento de sus estudiantes sea del mismo país para poder mantener la diversidad cultural. Además, el colegio es el único en el que el alumnado cambia de campus una vez al año: en primavera y otoño, los jóvenes asisten al Chateau du Rosey en el pueblo de Rolle, mientras que en invierno se mudan a unos exclusivos chalets en Gstaad, uno de los pueblos más caros del mundo
