La receta viral de cebolla caramelizada sin trampas ni azúcar se ha convertido en un éxito gracias a su simplicidad y resultados deliciosos. Los ingredientes necesarios son mínimos: cebolla, mantequilla y sal. Este enfoque aprovecha los azúcares naturales de la cebolla para lograr una caramelización perfecta sin necesidad de añadir azúcar. La preparación es sencilla y solo requiere un poco de paciencia para permitir que las cebollas se cocinen lentamente y desarrollen su sabor dulce característico.
Para comenzar a realizar la cebolla caramelizada, se deben pelar unas cuantas cebollas y cortarlas en juliana. Esta técnica de corte permite que las cebollas se cocinen de manera uniforme y libera sus azúcares más fácilmente. A continuación, se coloca un trozo generoso de mantequilla en una sartén grande y se derrite a fuego medio. La mantequilla no solo añade un sabor rico, sino que también ayuda a cocinar las cebollas de manera suave y uniforme.
Preparación de la cebolla caramelizada
Una vez que la mantequilla esté completamente derretida, se añaden las cebollas cortadas a la sartén. Es importante agregar un poco de sal en este momento, ya que ayuda a que las cebollas suden, liberando su humedad y comenzando el proceso de caramelización. La clave de la cebolla caramelizada es cocinar las cebollas a fuego muy bajo, lo que permite que los azúcares naturales de las cebollas se desarrollen lentamente sin quemarse.
Después de agregar las cebollas y la sal, se remueven bien para asegurarse de que todas las piezas estén cubiertas con mantequilla. Luego, se tapa la sartén y se deja cocinar a fuego muy bajo durante 30 minutos. Este paso inicial permite que las cebollas comiencen a ablandarse y a liberar sus azúcares lentamente. Pasados los primeros 30 minutos, se destapa la sartén, se remueve bien y se vuelve a tapar para continuar la cocción por otros 30 minutos.
Tiempo de caramelización
El proceso de caramelización toma aproximadamente una hora en total, pero es crucial mantener el fuego bajo y remover ocasionalmente para evitar que las cebollas se peguen o se quemen. Al final del tiempo de cocción, las cebollas deberían haber adquirido un color marrón profundo y una textura suave y pegajosa, indicando que están perfectamente caramelizadas. Este método asegura que la cebolla caramelizada desarrolle su máximo sabor dulce sin la necesidad de añadir azúcares adicionales.
Una vez que las cebollas estén completamente caramelizadas, se pueden transferir a un frasco de vidrio para su almacenamiento. Si se conservan en la nevera, la cebolla caramelizada puede durar hasta un mes, listas para ser utilizadas en una variedad de platos. Esta receta no solo es una manera deliciosa de disfrutar de las cebollas, sino también una técnica natural y sin trampas para resaltar su dulzura inherente.