El empresariado catalán da por hecho un Govern tecnócrata con Illa y ex de CiU

Illa será presidente, salvo sorpresa. El Cercle d’Economia reúne a los empresarios catalanes durante tres jornadas vibrantes y de calado. La máxima preocupación de este selecto lobby presidido por el exconsejero delegado de Banco Sabadell, Jaume Guardiola, se centra en la productividad empresarial en España, una de las magnitudes que detraen el crecimiento económico y empañan los datos de paro, especialmente en Cataluña, cuya ocupación se mantiene relativamente firme y cuya economía se sitúa por encima de la media española y europea.

No obstante, todos los asistentes esperaban poder obtener información de primera mano de Salvador Illa o Jaume Collboni para conocer el devenir de la Generalitat y del Ayuntamiento de Barcelona, ambos en minoría desde el 12 de mayo y 28 de mayo del pasado año respectivamente. Illa no ha realizado discurso alguno, pero sí el alcalde de Barcelona, que ha pedido tanto a ERC como Junts evitar el bloqueo político y la repetición electoral en Cataluña.

En el Cercle tienen claro que la repetición electoral sumiría a Cataluña en una situación de inestabilidad. Lo ha dejado muy claro Jaume Guardiola en su discurso inaugural de las jornadas de la institución: «Una repetición electoral es un lujo que no nos podemos permitir». Y es que, en este círculo empresarial no se ha pasado por alto que este 2024 ha sido el año con más elecciones en todo el mundo, pero con especial transcendencia en los próximos comicios del 9 de junio en la Unión Europea y el próximo 5 de noviembre en EE UU, donde Donald Trump no gana apenas respaldo.

Una repetición electoral es un lujo que no nos podemos permitir

Guardiola considera que la etapa del ‘procés’ se ha acabado, pero muestra su respeto por el independentismo, una opción política válida como cualquier otra. No obstante, ahora insta a recapacitar, reflexionar y volver al diálogo y el consenso, de donde nunca debió moverse la política.

LA NECESARIA BÚSQUEDA DE MAYORÍAS PARA ILLA

El resultado electoral obliga a ello, a buscar mayorías y éstas no son imposibles. De hecho, existen hasta tres alternativas distintas entre sí. Así, el PSC podría pactar con Junts; con ERC y los Comuns; e incluso suman con PP más Vox. La última vía parece del todo imposible, mientras que se deben dar otras circunstancias para poder alcanzar una negociación con los de Carles Puigdemont.

Pere Aragonès y Salvador Illa coinciden en las jornadas del Cercle
Pere Aragonès y Salvador Illa coinciden en las jornadas del Cercle d’Economia

Por el momento, las posiciones entre PSC y Junts se mantienen muy distantes. El propio Collboni pedía a ERC y Junts evitar el escenario del «bloqueo», mientras él mismo se ha enrocado en la alcaldía de Barcelona con una clara minoría y sin negociar absolutamente nada. Por el momento cuenta con el respaldo de ‘populares’ y Comuns con el fin de que la opción más votada, la de Xavier Trias, pueda hacerse con el bastón de mando.

«Dice Collboni que bloquear el Govern en Catalunya e ir a nuevas elecciones genera desafección…, ¿y lo dice sin ponerse rojo?», lanzó Trias tras el discurso de Collboni. «La desafección de la ciudadanía en la política se genera cuando se hacen pactos como el suyo con el PP y los Comunes para alcanzar la Alcaldía, y después mantener la ciudad bloqueada con un Gobierno débil y en minoría. Confiamos en que Collboni, Illa y el PSC no repitan la jugada y perjudiquen también a Catalunya», indicó.

El president de la Generalitat aseguró que había que poner en valor a las instituciones, pero fueron ellos mismos quienes la denigraron

En esta 39 reunión del Cercle d’Economia, iniciada en este miércoles en el Palau de Congressos de Catalunya, también ha hablado Pere Aragonès, con un repaso a todos sus logros y una advertencia sobre el crecimiento de la extrema derecha. Su discurso y conversación posterior con el propio Guardiola no dejó indiferente a ninguno de los presentes. Algunos de ellos consideraron que había que realizar una mayor autocrítica, pero otros indican que el dar el paso y presentar su renuncia era ya el mayor gesto.

El presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès (i), y el presidente del Cercle d'Economia, Jaume Guardiola
El presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès (i), y el presidente del Cercle d’Economia, Jaume Guardiola

«El president de la Generalitat aseguró que había que poner en valor a las instituciones, pero fueron ellos mismos quienes la denigraron, primero en 2017 con aquellas leyes de desconexión y después con el referéndum, pasando por encima del Estatut», destaca una fuente empresarial consultada por MONCLOA.

LA GENERALITAT QUE SE ENCONTRARÁ ILLA

Tanto Collboni como Aragonès han mostrado que sus medidas han mejorado Cataluña y Barcelona, respectivamente, aunque el socialista está prácticamente solo, y sin permitir la entrada de nadie en los mandos del Consistorio. Vivienda, gobernanza y mejoras del rating eran los principales retos y logros en este momento.

No obstante, ambos coinciden que el bloqueo sería una oportunidad perdida para impulsar a Cataluña. De hecho, el propio Collboni mostró su buena sintonía con Pere Aragonès. «Como alcalde he tenido la experiencia y quiero reconocerlo públicamente de haber trabajado con el gobierno del presidente Aragonès y haber obtenido resultados tranquilos y concretos», afirmó.

ERC no puede permitirse el lujo de avanzar hacia la repetición electoral

Esta declaración ha sido buena parte de la comidilla de los empresarios en el descanso. «Está más que hecho el Govern de Illa», apunta un empresario y expolítico. «ERC no puede permitirse el lujo de avanzar hacia la repetición electoral. Sería una pérdida de votos y escaños profunda», admite otra de las fuentes consultadas. Algunas de ellas prefieren mantener un escrupuloso silencio y evitan pronunciarse. «Son temas que habría que preguntarle a Illa», apuntan.

Sin embargo, el runrún empresarial es que Illa ya tiene ideado su Gobierno autonómico. Lejos de ser un equipo político e ideológico, el candidato socialista apostaría por un Ejecutivo tecnócrata. «Es lo mejor tras una crisis institucional y política», afirma un exalto cargo de CiU. De hecho, esta misma fuente desvela que el futuro presidente de la Generalitat impondría a personas no significadas del entorno de la antigua CiU. «Una buena repesca», apuntan.

EX DE CIU Y PDCAT, EN LAS QUINIELAS DEL PSC

El objetivo pasaría por mostrar que hay una parte de Junts anclada en el consenso, en el diálogo y alejada del enfrentamiento. Los nombres se repiten, especialmente entre quienes han dado su apoyo explícito a Illa, como Miquel Sàmper y Santi Vila, presente también en el Cercle. Vila ha rechazado volver a la primera fila política, pero su figura es imprescindible para entender a los críticos de Junts y Puigdemont. Fue el único de los presos que no tuvo respaldo en el independentismo y quien tuvo que hacer frente a la multa y a las costas del abogado con su propio dinero.

No son los únicos nombres que suenan. La exalcaldessa de Calella y exdiputada de CiU y PDeCAT Montserrat Candini también se ha posicionado a favor de Illa; como Carme Vidalhuguet (CiU); y el exdiputado de Junts Xavier Quinquillà; así como el exdirector general de prisiones, Ignasi Garcia-Clavel. Todos ellos han pertenecido a la parte moderada de CiU, donde la independencia se queda en un segundo plano.

David Font, Maria Victòria Forns y Quim Nin podrían también tener algo que decir, como exdiputados de ERC y CiU, como Francesc-Marc Álvaro y Carme Vidal Huguet, respectivamente. Sílvia Requena, Josep Pagès y Albert Torrent Vivancos, son otros de los nombres. La idea del PSC de Salvador Illa pasaría por optar a quedarse con la escisión del PDeCat, que se quedó fuera con Àngels Chacón por un puñado de votos en las elecciones de 2021.

Este espacio está huérfano ahora mismo y con el PSC podría ser el inicio de la recuperación del nacionalismo y el nacimiento de la sociovergencia en la Generalitat. Por el momento, Illa es candidato y todo queda a expensas de ERC y su negociación con el PSC.