Los funcionarios de prisiones de Cataluña están protestando contra la Ley o Estrategia de Obertalidat Penitenciaria que anunció la Generalitat a principios de este año con 15 medidas para reducir el internamiento penitenciario y consolidar la apuesta catalana por la ejecución penal en el medio abierto. El caso de los funcionarios de prisiones asesinados en el norte de Francia esta semana ha reavivado el dolor que produjo la muerte de Nuria, la cocinera de la prisión tarraconense de Mas d’Enric. Y eso, sumado a las agresiones que se producen por parte de presos reincidentes, son motivos suficientes para que los funcionarios exijan a los gobernantes de Cataluña, a los que están en funciones y a los que formen el Parlamento tras el 12-M, que se replanteen este sistema carcelario.
Fue en enero cuando la consejera de Justicia, Derechos y Memoria, Gemma Ubasart, presentó la Estrategia de Obertalidad Penitenciaria, para dar forma «al modelo de sociedad que queremos: una sociedad más cohesionada, más segura y sin víctimas», convencida de que el impulso del medio abierto y la transición a la comunidad genera tasas de reincidencias más bajas, «según la evidencia empírica», defendía ERC. También, el principio de proporcionalidad e ingreso en prisión como último ratio; el refuerzo de los mecanismos de aprendizaje y la reinserción en los centros penitenciarios.
Una de las medidas más innovadoras que establecía ese plan experimental era utilizar pulseras GPS como alternativa a prisión preventiva y reforzar los equipos de justicia restaurativa para aumentar los acuerdos que permitan suspender la pena privativa de libertad.
FUNCIONARIOS DENUNCIAN QUE REGRESADOS VUELVEN A REINCIDIR
Sin embargo, en la práctica diaria, los funcionarios de prisiones dudan de que este sistema sea el idóneo. Según el sindicato ACAIP Cataluña, este pasado martes 14 de mayo, tres internos progresados a tercer grado y que cumplen su condena en la Sección Abierta del CP Dones han sido regresados simultáneamente por presunta comisión de nuevo delito. Los tres están encausados en el mismo procedimiento judicial. Además, uno de los tres regresados participó en el motín del centro penitenciario Quatre Camins en abril de 2004 cuando un grupo de internos provocaron «graves incidentes» en los que resultó herido de gravedad el subdirector de Régimen Interno de esta prisión, que casi pierde la vida, y otros funcionarios fueron brutalmente agredidos.
ACAIP apunta también que «un interno que cumple condena de tercer grado tiene un nivel reincidencia inferior al que cumple su condena en 2º grado para sustentar la famosa obertalidat en el sistema penitenciario catalán. Por ello se pregunta: «¿Qué estudios científicos demuestran este hecho?, ¿es fiable el RisCanvi?». Se refieren al Protocolo de Valoración de Riesgo, un proyecto pionero en España, para dar respuesta a la evaluación y gestión del riesgo del conjunto de la población penitenciaria catalana. «Y si lo es, ¿hasta qué punto?», se preguntan fuentes del sindicato.
LOS FUNCIONARIOS DE PRISIONES DUDAN DE LA EFICACIA DE LA OBERTALIDAT
Según los representantes de los funcionarios de prisiones, «la probabilidad de cometer un delito siempre existe, sea pequeña o sea grande, por lo tanto, es cuantificable. ¿Cómo influye la obertalidat en esta probabilidad?, ¿qué clase de estudios se han realizado con internos clasificados en tercer grado para justificar la aplicación de la obertalidat?, ¿la obertalidat tiene algún límite o es aplicable de forma limitada?, ¿qué efecto tiene en los centros abiertos?, ¿qué se persigue realmente con la obertalidat?», preguntan desde ACAIP a los miembros del Govern en funciones.
Desde ACAIP insisten en que «obviamente, existen factores externos e internos que favorecen la reinserción en tercer grado, pero no es menos obvio que la obertalidat desoye otro tipo de factores que influyen notablemente en la reincidencia delictiva», y ponen de ejemplo la regresión comentada al principio, que «no es un hecho aislado, pero nos lo venderán como tal en aras de la obertalidat», denuncia el sindicato.
«Cuando hablamos de progresar a tercer grado a internos penados por un delito de asesinato, homicidios, lesiones… en muchos casos antes de cumplir la mitad de la condena, cuando todavía les falta por cumplir 5, 7 o incluso 10 años para la libertad definitiva, habrá quien piense que así se reinsertan con mayor facilidad, pero el riesgo que eso supone para el propio interno y para la sociedad no se quiere ver», argumentan fuentes de ACAIP.
«¿Cómo pueden entender la obertalidat los familiares de una víctima asesinada?, ¿qué tipo de relación hay entre la obertalidat y las víctimas de los internos que se están favoreciendo de ella?», vuelven a preguntar tratando de hallar más empatía por parte de quienes han formulado esta estrategia para las víctimas.
Además, recriminan que «nada se dice de los delitos cometidos en libertad condicional porque muy poco o nada se sabe» y vuelven a preguntar a las autoridades: «¿Qué seguimiento se hace en libertad condicional?, ¿quién lo hace?, ¿cómo lo hace?, ¿qué estudios hay al respecto?, ¿premia la obertalidat a penados de larga condenas por delitos contra las personas?». El tiempo lo dirá.
NO CESAN LAS AGRESIONES A FUNCIONARIOS DE PRISIONES
Hay una doctrina jurídica que defiende que no se debe legislar en caliente. Pero ahora son los ánimos de los funcionarios de prisiones los que están muy caldeados, por casos como el de Nuria en España o el de los funcionarios de prisiones de Évreux que fueron asesinados tras ser atacados el martes 14 de mayo en el peaje de una autopista en el norte de Francia para liberar a un preso que había sido encarcelado la semana anterior, compañeros por los que también se han guardado minutos de silencio en las puertas de prisiones españolas, en solidaridad con ellos y sus familias.
Además, las agresiones en las cárceles españolas no cesan. El sindicato Tu Abandono Me Puede Matar ha ido dando detalles en lo que llevamos del mes de mayo de distintos casos, como una otra brutal agresión en Quatre Camins, donde un preso atacó con un pincho a un funcionario. Otro reo de A Lama amenazó con una barra metálica a varios funcionarios antes de atrincherarse en una biblioteca, o la pelea en El Acebuche de Almería tras la apertura de celdas por la tarde, que se saldó con 3 internos aislados y 5 reos cambiados de módulo. Por lo que los sindicatos siguen insistiendo en la importancia de contar con más personal, una formación continua de los trabajadores y ser urgentemente considerados agentes de la autoridad.
