El ayuno intermitente se ha convertido en uno de los métodos de alimentación más populares de los últimos años y consiste en un patrón que cicla entre los periodos de comer y ayunar. Esta técnica no se centra en una dieta específica, si no en una estructura que fija un marco de tiempo para consumir los alimentos.
Existen diferentes formas de hacer ayuno intermitente, sin embargo los métodos más populares implican ayunar entre 12 y 24 horas, entre una o dos veces por semana. Pero, la gran pregunta es, ¿cuál es el efecto de esta técnica de alimentación en el organismo? Aunque muchas personas lo recomiendan, antes de iniciar un estilo de vida con ayuno intermitente es importante entender cómo funciona y cuáles son los efectos que nuestro cuerpo experimentará.
Esto es lo que ocurre con el ayuno intermitente
El ayuno intermitente genera cambios significativos desde el punto de vista metabólico a medida que transcurren las horas sin ingerir ningún tipo de alimento. En primer lugar, los niveles de insulina pueden bajar significativamente. Cuando comemos, los niveles de insulina se incrementan para permitir que las células absorban la glucosa, pero cuando ayunamos los niveles de esta hormona disminuyen y el cuerpo emite señales para utilizar otras fuentes de energía, como la grasa almacenada.
Después de varias horas de ayuno, el cuerpo entra en un estado metabólico denominado cetosis, en el cual el hígado convierte las grasas en cetonas que son utilizadas como fuente de energía alternativa para el cerebro y el resto del organismo. Esto es ideal para la pérdida de peso, mejorar la sensibilidad a la insulina, reducir la inflamación en el organismo y promover una buena salud cerebral cuando se efectúa de la manera correcta.
¿El ayuno intermitente es seguro para todos?
Aunque sus beneficios son muy populares en internet, el ayuno intermitente no es un método seguro para todas las personas. Este método puede ser muy beneficioso para adultos que son sanos, pero puede resultar riesgoso para aquellas personas que padecen ciertas afecciones médicas como la diabetes, las enfermedades renales o trastornos de la conducta alimentaria. De modo que es indispensable consultar con un especialista para iniciar este estilo de vida.
Es importante mencionar que, sin importar el método de alimentación que elijamos y las horas de ayuno que se realicen, es crucial que la alimentación sea balanceada con una buena selección de las comidas, bajo consumo de alimentos ultraprocesados y un equilibrio de todos los nutrientes, pues esto es lo que tendrá mayor impacto en la salud a largo plazo. Además, es importante cuidar otros hábitos como el ejercicio físico constante y el descanso nocturno óptimo.
