La salud mental y la salud intestinal tiene una conexión muy estrecha que ha sido investigada por la ciencia durante los últimos años. Esto se debe a que el estado de los intestinos tiene un importante impacto en toda la química de la que depende el estado de ánimo, las emociones y, en general, el bienestar mental.
Seguramente te preguntarás cómo es posible este vínculo entre sistemas tan diferentes. Todo inicia con la naturaleza del intestino, pues este contiene una inmensa comunidad de bacterias que son conocidas como la microbiota intestinal, la cual siempre debe estar en equilibrio para mantener la salud digestiva. En estudios recientes se ha demostrado que estos microorganismos sanos pueden tener una importante influencia en la producción de neurotransmisores esenciales para el estado de ánimo como la serotonina y la dopamina.
¿Por qué la salud mental depende de la salud intestinal?
En el mundo, muchas personas padecen disbiosis, la condición que se presenta cuando la microbiota intestinal se encuentra alterada. Esto puede repercutir en el buen funcionamiento químico del organismo y desencadenar o empeorar problemas mentales tales como la ansiedad, depresión, trastornos del sueño, fatiga mental, trastorno bipolar y otros. En este sentido, es esencial tener un cuidado de la salud integral para proteger nuestro bienestar mental. ¿Pero cómo podemos lograr esto de manera efectiva?
Aunque parezca complicado, tener un cuidado de la salud que sea integral solo depende de hábitos y un buen estilo de vida. La base para esto arranca con una alimentación balanceada rica en frutas, verduras, legumbres y cereales, además de tener los tres macronutrientes en equilibrio. Es necesario reducir y, en algunos casos, eliminar la ingesta de alimentos ultraprocesados, pues estos son los principales responsables de alterar la microbiota intestinal.
Tomar probióticos puede mejorar la salud mental

La ingesta de probióticos, tanto en alimentos como en suplementos, puede ser de gran ayuda para mantener la microbiota intestinal en equilibrio y, por ende, proteger la salud mental. Estos pueden encontrarse en alimentos como el yogur griego, el chucrut, las hortalizas y otros, además en el mercado se pueden encontrar probióticos en cápsulas o en polvo que pueden ingerirse diariamente con las indicaciones de un especialista.
Cabe destacar que, un buen estado de la Salud mental no solo depende de la alimentación, también es importante cuidar otros hábitos como son el ejercicio físico constante y el descanso nocturno adecuado. Además, en caso de cualquier malestar desde el punto de vista mental, es recomendable asistir con un especialista que pueda brindar la orientación y tratamiento psicológico más conveniente.