En ocasiones, un pequeño detalle puede arruinar por completo una cita, incluso si todo lo demás encaja a la perfección. Si hay algo que no te agrada, es posible que no haya solución. Este fue el caso de Inés, una quiromasajista de 46 años de Santander, a quien algunos comparan con Bridget Jones debido a las situaciones surrealistas que ha experimentado en sus relaciones pasadas. Decidió participar en ‘First Dates’ con la esperanza de encontrar a alguien con quien casarse, ya que su compromiso anterior fue cancelado a pocos meses de la boda. Ahora, sueña con una boda al aire libre, con muchas damas de honor, que refleje su personalidad: «Quiero una boda que sea como yo».
6BELÉN YA LE HABÍA ECHADO EL OJO A RICARD EN FIRST DATES
Lo habitual en ‘First Dates’ es que ambas partes se conozcan al llegar al restaurante. Sin embargo, de vez en cuando surgen situaciones extraordinarias, como la de Belén, una soltera catalana de 59 años, que se presentó al programa con la esperanza de conocer a Ricard, otro soltero catalán de 57 años que no había tenido mucha suerte en su cita anterior.
Aunque no se conocían personalmente, Belén había sentido un flechazo al ver a Ricard en televisión, y estaba decidida a conocerlo en persona. Este caso añadía un toque de intriga y romance al programa, ya que ambos llegaban con expectativas y emociones especiales. Ricard, aún sorprendido por la situación, se mostró receptivo y emocionado. «No es una cita aleatoria lo que vas a tener. ¿Te atreves?», le preguntó Sobera. Ricard respondió con entusiasmo: «Claro, por supuesto. Ha sido como una pedida».