Penélope Cruz es conocida por su entrega y pasión en cada interpretación. A sus 50 años nos ha demostrado cómo se sumerge por completo en sus personajes, aportando una gran intensidad emocional a sus actuaciones. Su belleza es innegable, pero va más allá de lo físico, su magnetismo natural atrapa la atención del espectador y la convierte en una presencia interesante en la pantalla.
Películas como «Volver», «Vicky Cristina Barcelona», «Madres paralelas» y «La Red Avispa», llevan su firma actoral y, aunque suele ser una mujer fuerte, resulta ser que sufre de una fobia muy particular de la que poco ha hablado pero que tiene su génesis en un momento traumático de su infancia.
Qué le ocasionó a Penélope Cruz la amaxofobia
Penélope Cruz es amaxofóbica. La amaxofobia es un miedo intenso e irracional a conducir o estar en un vehículo, ya sea como pasajero o conductor. Puede ser una condición debilitante que impacta significativamente la vida cotidiana de una persona. La razón por la que la actriz desarrolló este trauma tan curioso es porque vio cuando a los 8 años un coche atropellaba a su hermana Mónica Cruz, quien permaneció mucho tiempo inmóvil en un hospital.
«La atropelló un coche delante de mí, cuando yo tenía 8 o 9 años y mi hermana, tres años menos. Recuerdo que llevaba un abrigo rojo. El tiempo se detuvo en ese instante. Fue un gran trauma, porque la vi perder el conocimiento. Estuvo paralizada en el hospital durante mucho tiempo», recordó la intérprete madrileña en una entrevista con la revista Elle. Asimismo, reveló que a raíz de este suceso desarrolló una especie de hipersensibilidad: «Tengo hipersensibilidad visualmente, al sonido y también a los sentimientos de las personas, por lo cual por un lado me siento afortunada porque me viene muy bien para mi carrera como actriz, pero por otro lado me hace sufrir mucho más todas las cosas», afirmó.
Tratamientos que pueden curar la fobia que sufre Penélope Cruz
Entre los síntomas que pueden padecer una persona que le teme a los coches se encuentran: Ataques de ansiedad, taquicardia, sudoración, náuseas, mareos, temblores, sensación de pánico, miedo a perder el control, miedo a accidentes y pensamientos intrusivos. La amaxofobia o miedo a conducir puede tratarse desde tres enfoques, con terapia cognitiva conductual, de exposición y de relajación.
Por el momento se desconoce si Penélope Cruz se ha sometido a alguna terapia para superar su temor. Lo cierto es que, intenta en lo posible no subirse a coches y cuando está en uno, procura usar el cinturón de seguridad muy bien ajustado.
