viernes, 22 noviembre 2024

Los mil errores de Pedro Sánchez en su decisión dejan cuatro virtudes al PSOE

Pedro Sánchez ha mantenido en vilo a España durante cinco días para mantenerse en La Moncloa. El silencio público del presidente del Gobierno durante 112 horas casi exactas quedaba roto con un mensaje institucional tras una decisión sin precedentes e insólita en toda la democracia española. Hasta ahora, ningún jefe del Ejecutivo había tomado un período de reflexión de forma unilateral y sin consultar con absolutamente nadie de su gabinete. Tal es así, que la ministra María Jesús Montero, llamada a la sucesión de Pedro Sánchez, se enteró de su carta abierta al mismo tiempo que la ciudadanía. Es decir, para Pedro Sánchez, los afiliados están al mismo nivel que los dirigentes de su formación.

Visto el error, el líder del PSOE ha tratado de corregirlo a la hora de desvelar su decisión a sus fieles escuderos, tras tratarlos como a los militantes, con el mismo rasero, actores secundarios en una película donde él es el único protagonista.

CERDÁN, MONTERO Y BOLAÑOS SE ENTERARON ANTES

Tan sólo tres personas se han enterado de su decisión antes que el resto y tampoco mucho antes. Así, Santos Cerdán, María Jesús Montero y Félix Bolaños supieron la verdad a las 10.00 horas, una hora antes que el resto. Para fuentes socialistas consultadas, se trata de uno de los «mil errores» cometidos por Pedro Sánchez a la hora de comunicar su decisión. Viajó a Zarzuela para explicar al Rey Felipe VI que se iba a tomar estas últimas cinco jornadas para pensar y repensar en soledad, solo con el apoyo de Begoña Gómez, su esposa, sobre su futuro y por ende sobre el del PSOE.

Pedro Sánchez no consultó con ningún dirigente sobre su situación, no habló ni con Montero ni con Santos Cerdán, número dos y tres del PSOE, tampoco acudió por primera vez al Comité Federal del partido, un hecho insólito, más cuando los estatutos exigen que sea el secretario general quien lo encabece. Pero Pedro Sánchez estaba en otras cuestiones, algunas de ellas de enorme calado. Son cinco días los que ha tenido para montar el relato de poner «punto y aparte» no solo en la legislatura, sino en los consensos democráticos que trajo la Transición.

María Jesús Montero se da un baño de masas en plena reflexión de Pedro Sánchez
María Jesús Montero se da un baño de masas en plena reflexión de Pedro Sánchez

Es un punto de inflexión al que no ha tenido que enfrentarse España en sus ahora 46 años de Constitución. Para ello, el relato se ha centrado en los «ataques» de la ultraderecha y la derecha, una persecución que hasta ahora el presidente, según sus palabras, nunca se había sufrido en España.

PEDRO SÁNCHEZ COMPARA LOS ESCRACHES A PABLO IGLESIAS CON TUITS

Fiel reflejo de sus palabras es que el máximo dirigente del PSOE no puede salir a la calle sin abucheos, escraches y sonoras pitadas, pero en nada le diferencia de los sufridos por otros dirigentes del PP, como Cayetana Álvarez de Toledo en Barcelona, Cristina Cifuentes, Inés Arrimadas, Albert Rivera, Santiago Abascal y dirigentes de Vox -apedreados en Vallecas y en Vic-, así como numerosos concejales de Ciudadanos, Vox y PP en Cataluña, con dianas en las puertas de sus domicilios o sedes asediadas.

Tampoco se libran en la izquierda de las respuestas a estos escraches, como ocurrió con el entonces matrimonio entre Irene Montero y Pablo Iglesias. De hecho, en la entrevista en RTVE este lunes, Sánchez ha comparado esas marchas al chalé de la familia de Iglesias y Montero con los tuits recibidos por Carmen Calvo en la red social Twitter por su clara oposición a la ley trans.

CARAZO Y FORTES HACEN DE PERIODISTAS ANTE PEDRO SÁNCHEZ

Entrevistado por Marta Carazo y Xavier Fortes, curtidos en mil batallas y con Gobiernos del PP y el PSOE, el líder del PSOE ha mostrado un relato muy endeble a la hora de justificar la decisión. Un claro error al no rodearse de un equipo más curtido en el terreno político. Desde luego, Carazo y Fortes no han realizado masaje alguno, ni preguntas sin repreguntas. Se han mantenido como dos servidores públicos que sirven a los espectadores y no al presidente del Gobierno. La vieja guardia de la TVE al más puro estilo periodístico de época, mal que pese a muchos.

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en un mitin durante esta campaña del 12-M
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en un mitin durante esta campaña del 12-M

Y es que, tanto Carazo como Fortes despiertan a la derecha más irredenta y dura por verter sus opiniones, como periodistas y analistas del clima político que son, en sus programas. Fortes, cabe recordar, viene de la vieja guardia también de la televisión gallega, la misma que comandó Feijóo durante años y sin ataduras.

EL ENFADO EN PRISA PERMANECE

Un nuevo error de Sánchez era esperar un masaje en su televisión pública, pero espera que en Prisa sean más indulgentes. Sin embargo, en el medio afín al progresismo y que ha defendido a Pedro Sánchez a capa y espada hay un clima entre el enfado, el cabreo y la desafección por la ‘traición’ de no convocarles a la hora de mostrar su carta en público. Pedro Sánchez escogió Twitter y no las páginas de El País, con la repercusión mundial que hubiera obtenido. Todos los medios citando a un externo de Prisa. La noticia jamás soñada por un diario.

No obstante, hasta los plumillas de cabecera denuncian públicamente estas formas, así como ningunear a toda una cohorte de medios afines. Y es que, entre todos los objetivos fijados -acabar con la prensa financiada por el PP y ciertos empresarios; o reformar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ); o qué rumbo tomar ahora en ese «punto y aparte»– tanto en su corto mensaje como en la entrevista de anoche, Pedro Sánchez no ha dado a conocer en qué cosistirán las medidas para lograrlos.

Ni una sola de sus iniciativas, descritas en la carta, se ha puesto encima de la mesa. No habrá así moción de censura y espera ahora que el PP le llame para comparacer en el Senado, junto a su esposa, Begoña Gómez, como si fuera un delito ser llamado a declarar en la Cámara Alta. Cabe recordar que el PSOE ha llamado a Isabel Díaz Ayuso por el contrato que obtuvo su novio de un Ministerio, pero no a Alberto González, en el Congreso de los Diputados.

PEDRO SÁNCHEZ NO DA EXPLICACIONES

Pedro Sánchez no ha desvelado las líneas de su nuevo plan, de su punto y aparte. ¿Hacia dónde vamos? Tan solo apunta que hay que regenerar la democracia para avanzar hacia una mayor consolidación de las libertades y los derechos. El cómo se hará y qué se articulará para lograrlo tampoco es capaz de explicarlo a pesar de tener cinco días para pensarlo y repensarlo. En su cabeza sonarán trompetas celestiales, pero de cara a la ciudadanía no hay argumento alguno que explique cuáles son los síntomas, el diagnóstico y el tratamiento a seguir, como haría un buen médico ante un caso complicado.

Sin ningún tipo de explicación, Pedro Sánchez trazará un plan, con el consenso de los medios de comunicación, expertos, asesores y sus fieles ministros, para acabar con los bulos y el insulto en las instituciones. De nuevo, sin conocer las herramientas que se adoptarán. Por ahora, se limita a señalar que sigue, que se mantiene en La Moncloa y que luchará tras «diez años de acoso» contra la derecha y la ultraderecha.

LA CIUDADANÍA: TRES MANIFESTACIONES CON MENOS DE 12.500 PERSONAS

Todo ello por el supuesto respaldo de la ciudadanía. No ha consultado con nadie, tan solo se fija en las 12.500 personas que salieron para arropar a Ferraz y en las otras miles que salieron el domingo. Es decir, cambia las urnas por la concentración en las calles. Por ahora, la más numerosa fue la del PP contra la amnistía, con cerca de un millón de personas en las calles.

Esta decisión no solo ha crispado a la oposición en el Congreso, sino también a sus propios socios, como ERC, que la tilda de circo. De esta forma, el PSOE ha estado en vilo y con una congoja sin precedentes. Sánchez guardó silencio y nadie sabía qué iba a hacer. Eso sí, se mensajeó con algunos de sus más allegados, pero guardándose su decisión. Este silencio se entendió como una dimisión, pero nada más lejos. El manual de resistencia de Pedro Sánchez es amplio y volvió a tirar de él como se esperaba. De nuevo, los mensajes de Pedro Sánchez llegan sin responder preguntas de los periodistas. Tan solo cuando las entrevistas ya están concertadas, que no pactadas.

EL PNV SE ENTERÓ AL MISMO TIEMPO QUE FEIJÓO

Pero Pedro Sánchez insistió en su error al no ser capaz de tener una mínima consideración con sus propios compañeros de Gobierno, los mismos con los que se reúne en el Consejo de Ministros, los mismos a los que pide lealtad en cada momento. Tampoco deja en buen lugar a sus socios de investidura y legislatura. Pedro Sánchez no informó personalmente al PNV, como tampoco a ERC, Junts, Bildu o BNG. Todos ellos se han enterado de la decisión de Pedro Sánchez por televisión, mientras exigen los cumplimientos de los programas y acuerdos pactados para la investidura. Es decir, Andoni Ortuzar se enteró a la vez que un afiliado del PP en Alicante. Todo un símbolo.

Estos partidos se dirigen ahora en su contra por hacer campaña electoral desde las instituciones, hecho por el que fue multada Isabel Rodríguez, portavoz del Gobierno, en las pasadas elecciones generales. Y es que, a los socialistas les gusta jugar al filo del abismo y no se equivoquen, se mueven por esa delgada línea como pez en el agua.

CABREO EN LOS SOCIOS DEL PSOE CON VENTAJAS

A pesar de no desvelar ni una sola ley para corregir los problemas que asolan supuestamente a la democracia, la performance de Pedro Sánchez ha dejado dos virtudes importantes. La primera de ellas es que su discurso victimista polariza, hasta el punto de pedir los propios manifestantes el cierre de medios; como también moviliza a las bases; y crece su imagen de líder en los suyos, dejando al PSOE sin una cabeza visible para cuando Sánchez ya no esté. Ese era el principal temor del PSOE. «¿A quién ponemos?», indicaba un dirigente socialista.

El problema de hacer más grande a Sánchez es que empequeñece al resto y ya se sabe el viejo dicho, una formación es tan fuerte como su eslabón más débil. Sin un equipo fuerte y a la altura, el líder podría caer en cualquier momento.

Otra de las premisas de su relato es que cualquier información que se pueda publicar pase ahora por ser nada más y nada menos que un bulo, independientemente de si es o no verdad. Por último y como virtud, con Pedro Sánchez al frente, el PSOE va a tener más fácil fagocitar a Sumar, así como los nacionalismos de Junts, ERC y PNV.

Y es que, a la hora de la verdad y si el PP se escora demasiado a la derecha, el centro pierde fuerza y se alía con el PSOE, como ocurrió en 1993, 2008 y 2019. Situar al PP como el Doberman, como el enemigo a batir por estar alineado con Vox, hace huir al votante moderado. De ahí nació Ciudadanos. Y sí, el PP no afloja en la tensión, como tampoco deja de responder a cada paso que da el PSOE. Todo un caldo de cultivo para frenar a Feijóo.