A tan solo una semana del emblemático 2 de mayo, la atmósfera política en la Comunidad de Madrid palpita con incertidumbre mientras se ultiman los detalles para los eventos que marcarán la jornada en la histórica Puerta del Sol. En este marco, el Gobierno regional, bajo el liderazgo de Isabel Díaz Ayuso, se encuentra en una encrucijada sobre sí tras levantar el veto al Ejecutivo central y extender una invitación al ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, este acudirá o no a las celebraciones.
Esta delicada consideración surge en respuesta a la confirmación del ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, de su ausencia en la celebración. Bolaños ha optado por no repetir el polémico episodio del año anterior, donde su presencia generó controversias, prefiriendo dirigirse esta vez a Sevilla para participar en un congreso enfocado en la persecución del crimen.
Ese día tengo en Sevilla un congreso para perseguir la delincuencia. No tengo mucho más que añadir
Félix Bolaños, ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes
«Ese día tengo en Sevilla un congreso para perseguir la delincuencia. No tengo mucho más que añadir», estas fueron las palabras de Félix Bolaños tras ser interrogado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre si acudirá o no a la Puerta del Sol el 2 de mayo, tal y como hizo el año pasado.
El dilema que enfrenta el Gobierno madrileño refleja las tensiones políticas que persisten entre el ámbito regional y el nacional. La invitación a Ángel Torres, figura representativa del Gobierno central, representa la intención de Madrid de suavizar las relaciones y fomentar un clima de diálogo y cooperación entre ambas instancias.
MADRID ESPERA QUE TORRES NO ACUDA
El portavoz del Gobierno madrileño, Miguel Ángel García Martín, confirmó que la invitación ha sido cursada y ahora están a la espera para conocer la decisión del ministro. Sin embargo, las expectativas del Gobierno madrileño no son necesariamente optimistas, ya que esperan una respuesta negativa por parte de Torres.
La razón detrás de esta esperanza reside en la peculiar agenda del ministro, quien tiene la tendencia a programar actos oficiales en Canarias en la víspera de fines de semana y festivos para regresar a casa durante estos periodos de descanso. Con el 1 de mayo, siendo festivo en toda España por el Día del Trabajador, seguido por otro día festivo el 2 de mayo, específicamente en la Comunidad de Madrid, el Gobierno regional recuerda las anteriores prácticas del ministro.
Recientemente, Torres organizó un evento el viernes 19 de abril en Gran Canaria a las 9:00 horas, seguido de otro acto en las islas el lunes 22 de abril, lo que implicó que pasara todo el fin de semana en su hogar. Estos antecedentes refuerzan la expectativa de que el ministro, opte por quedarse en Canarias durante el próximo fin de semana festivo en lugar de asistir a los eventos en Madrid.
Sin embargo, el propio Torres ha negado haber recibido la invitación por parte de la Comunidad de Madrid para los actos del 2 de mayo en la Puerta del Sol. En caso de recibirla, tanto él como su equipo evaluarán cuidadosamente su participación en dichos eventos, manteniendo así un aura de incertidumbre sobre su posible presencia en la capital española en esa fecha tan significativa.
EL DELEGADO DEL GOBIERNO DE MADRID INVITADO
En un giro que llama la atención en el escenario político madrileño, el portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid ha anunciado que se ha extendido una invitación al delegado del Ejecutivo central en la región, Francisco Martín, para participar en los próximos eventos conmemorativos. Esta invitación se produce en medio de las tensiones que han caracterizado las relaciones entre el gobierno regional y el central en los últimos meses.
La decisión de invitar al delegado del Gobierno central cobra relevancia a raíz de los recientes acontecimientos durante los actos conmemorativos de la Constitución española, organizados por la Comunidad de Madrid. En aquella ocasión, Martín se convirtió en el centro de atención al ser relegado de los eventos, un gesto interpretado como una respuesta directa por parte de la región a la Moncloa, tras no haber sido invitada a la inauguración de un nuevo tramo del AVE.
Sin embargo, a pesar de este choque institucional, la invitación al delegado del Gobierno, Francisco Martín, para la celebración del aniversario de la Constitución, ya había sido enviada previamente. Aunque el Gobierno regional decidió mantener la invitación, optó por excluir a la Delegación del Gobierno de cualquier participación en el evento, aunque se le concedió la oportunidad de pronunciar un breve discurso.
Desde la Comunidad de Madrid, se ha argumentado esta posición explicando que, históricamente, la organización del acto ha recaído principalmente en el gobierno autonómico, dado que se lleva a cabo en la sede de la Real Casa de Correos, en la emblemática Puerta del Sol. Se afirma que la logística, los costos, el programa del evento, las actuaciones y la mayoría de los invitados son responsabilidad de la Puerta del Sol. Según esta perspectiva, la Delegación del Gobierno solía sugerir algunos invitados, pero en esta ocasión ni siquiera pudo hacerlo.
