La tensión laboral en el sector de la Sanidad Privada de la Comunidad de Madrid alcanza un punto crítico, con los profesionales sanitarios advirtiendo sobre la posibilidad de una huelga inminente si persiste el conflicto con la patronal respecto a la aplicación del convenio colectivo.
La advertencia de movilización fue emitida por los sindicatos representativos del sector el pasado viernes, quienes anunciaron una serie de «movilizaciones progresivas» dirigidas a los aproximadamente 75.000 trabajadores de la Sanidad Privada en Madrid. Estas acciones escalonadas están diseñadas como un llamado de atención a la patronal para que cumpla con los términos del convenio colectivo.
Los sindicatos señalan que, de no resolverse el conflicto y no cumplirse con lo acordado en el convenio, las movilizaciones podrían intensificarse hasta culminar en un paro total de los servicios de Sanidad Privada en la región. Esta medida de presión busca hacer hincapié en la importancia de garantizar condiciones laborales justas y adecuadas para los trabajadores del sector privado, así como asegurar la calidad de la atención sanitaria para los pacientes.
DAN DE PLAZO HASTA EL VIERNES
Las organizaciones sindicales que representan a los trabajadores de la Sanidad Privada en la Comunidad de Madrid han fijado el viernes, 26 de abril, como fecha límite para que la patronal cumpla con los términos establecidos en el convenio colectivo y alcance un acuerdo antes de que los sindicatos recurran a los tribunales. En palabras de los representantes sindicales, «la resolución de este conflicto está en manos de la patronal».
El ultimátum surge tras una reunión entre la Asociación de Centros de Hospitalización Privada de la Comunidad de Madrid (ACHPM) y diversos sindicatos del sector, celebrada el pasado viernes con el objetivo de resolver las discrepancias. Lamentablemente, las partes no lograron llegar a un punto intermedio que satisficiera a ambas partes.
LOS SINDICATOS AMENAZAN CON PARALIZAR EL TRABAJO DE 75.000 PROFESIONALES DE LA SANIDAD PRIVADA
Por otro lado, los sindicatos de Comisiones Obreras y Satse han expresado su descontento ante la falta de acuerdo, advirtiendo sobre un escenario conflictivo en el horizonte. Según han afirmado, «la patronal de la Sanidad Privada de Madrid está insultando a los más de 75.000 profesionales» que desempeñan sus funciones en hospitales, clínicas privadas y concertadas en la región.
La tensión entre los trabajadores y la patronal refleja la urgencia de resolver las discrepancias y garantizar condiciones laborales justas y adecuadas en el sector de la Sanidad Privada de Madrid. Mientras tanto, el reloj sigue avanzando hacia el viernes, fecha límite impuesta por los sindicatos, y la incertidumbre sobre el resultado de las negociaciones sigue en el aire.
LA SANIDAD PRIVADA: «NO VAMOS A DAR UN PASO ATRÁS»
Los trabajadores de la Sanidad Privada de Madrid están dispuestos a llevar a cabo «movilizaciones progresivas que desembocarán en una huelga» si es necesario. Esta medida, según han afirmado, se articulará de diversas formas con el objetivo de paralizar el sector y afectar a la prestación de asistencia sanitaria en todos los hospitales concesionados de la región, así como en la mayoría de los hospitales privados.
«No vamos a dar un paso atrás de lo negociado», han afirmado los representantes de los trabajadores. Desde Satse Madrid, el Sindicato de Enfermería de Madrid, su delegada en la Sanidad Privada, Alicia Gómez, ha explicado en declaraciones a RNE, recogidas por MONCLOA, que la patronal parece estar inclinada a incumplir el convenio colectivo que firmaron en su momento.
Uno de los puntos de conflicto señalados por Gómez es el escaso reconocimiento de la carrera profesional. Según ha explicado, se acordó la aplicación de un plan de fidelización o carrera profesional durante cuatro años, en los que se debía aplicar un aumento salarial anual del 1,33% sobre ciertos conceptos. Sin embargo, la patronal parece estar tratando de modificar estos porcentajes, lo que afectaría negativamente a las retribuciones de los trabajadores.
Ante esta situación, los profesionales de la Sanidad Privada se mantienen firmes en su postura y están preparados para tomar medidas contundentes para defender sus derechos laborales y asegurar condiciones justas en el ámbito sanitario privado de la región. La incertidumbre sobre el futuro de las negociaciones persiste, pero los trabajadores están determinados a hacer valer sus demandas.
LAS PETICIONES
El desencadenante del actual conflicto laboral en el sector de la Sanidad Privada radica en el convenio colectivo firmado en 2023 entre las organizaciones sindicales y la patronal. Este acuerdo, que se suponía sería un avance significativo en las condiciones laborales de los trabajadores del sector, ha generado discrepancias importantes, especialmente en lo que respecta a la mejora salarial y la carrera profesional.
Una de las principales mejoras propuestas en el convenio era un aumento sustancial en la subida salarial, así como la creación y asignación de recursos económicos iniciales para el plan de fidelización y calidad, también conocido como carrera profesional. Además, se buscaba el reconocimiento del derecho a la acumulación de la lactancia, así como la actualización y mejora de los permisos retribuidos y el mantenimiento de la jornada máxima anual en 1.680 horas.
Sin embargo, el punto de fricción más importante ha resultado ser la carrera profesional. Mientras que las organizaciones sindicales defienden un incremento salarial del 5%, pactado y firmado en el convenio, la patronal ha mostrado una postura más reticente, considerando este aspecto como algo meramente simbólico y proponiendo una subida salarial inferior a 1 euro en las categorías más altas.
En resumen, las demandas de los trabajadores de la Sanidad Privada giran en torno a la necesidad de garantizar condiciones laborales justas y adecuadas, con especial énfasis en la mejora salarial y el reconocimiento de la carrera profesional como un aspecto fundamental para el desarrollo y la estabilidad laboral en el sector.
