El giro pragmático emprendido por la izquierda abertzale hace casi 3 lustros no ha sido suficiente para evitar que la sociedad vasca, una vez más, haya depositado su confianza de forma mayoritaria en el PNV.
EH Bildu se quedó cerca del triunfo en votos tras sortear una última semana de campaña marcada por la negativa de su candidato Pello Otxandiano a calificar a ETA como algo más que una «banda armada» ante Aimar Bretos en la Cadena SER.
El medio que también ha intentado marcar agenda es la radiotelevisión pública vasca EiTB, nutrida este 2024 con una subvención de 192,1 millones de euros por parte del Departamento de Cultura y Política Lingüística (que dedica más de la mitad de su presupuesto a sufragar la Corporación mediática).
ETB PRONOSTICÓ EL TRIUNFO EN VOTOS DEL PNV
La cadena televisiva estrella de la radiotelevisión pública vasca, ETB2, arrancó este domingo la tarde-noche electoral con las espadas en todo lo alto. El especial presentado por África Baeta y Juan Carlos Etxeberria arrancó minutos antes de las 19.30 horas y antes del cierre de colegios mostró la llegada del candidato ‘peneuvista’ Imanol Pradales a la sede su partido, Sabin Etxea, edificado sobre el solar de la casa del fundador de la formación Sabino Arana.
A las 20.00 horas se vivían momentos de tensión ante la publicación del sondeo de Gizaker, que pronosticó un triunfo en votos del PNV, respaldado por Vizcaya y victorioso con alrededor de 3 puntos de ventaja sobre su rival directo (tal y como acabó confirmándose).
El sondeo completado con 3.600 encuestas barruntaba un empate técnico en escaños entre jeltzales y la izquierda abertzales, a los que se les adjudicó entre 26 y 28 escaños. El sondeo falló al pronosticar más votos a Podemos que Sumar y dejaba fuera a Vox, pero el mismo no debía ser demasiado de fiar para ETB ya que minutos después de publicarse el presentador Juan Carlos Etxeberria dejaba clara su percepción: «No tenemos ni idea de lo que va a pasar esta noche».
Uno de los tertulianos señalaba entre risas que interpretar el sondeo era como jugar a ser el vidente Rappel. Y otra contertulia se mostraba feliz porque la campaña había sido «muy vasca» y centrada en la gestión. Antes de las 9 de la noche, EH Bildu daba las gracias en su campamento electoral montado en el Mercado del Ensanche de Bilbao.
E instantes después se empezaban a conocer los primeros resultados oficiales. El Gobierno Vasco, a través de su portavoz Josu Erkoreka, señalaba que con el 24% de los votos contados estaban en cabeza los de Arnaldo Otegi. El escrutinio avanzaba con rapidez y el PNV recuperaba el primer puesto mientras Elkarrekin Podemos no lograba representación.
Sí que lo hacía Vox, que salvaba su escaño pese a que muchas encuestas pronosticaron lo contrario.
NOCHE APRETADA
El frenesí de resultados atropellaba al ‘pobre’ Etxeberria, que se liaba con los números mientras Podemos se veía con pie y medio fuera del Parlamento Vasco y el PNV saboreaba un inesperado triunfo por la mínima. Los escaños bailaban conforme iba pasando la noche mientras eran competidos en Álava por apenas media docena de papeletas.
Pasadas las nueve y media de la noche, Otxandiano llegaba al Mercado del Ensanche entre aplausos de sus partidarios. Más frío se presumía el ambiente en formaciones como el PP, que ha protagonizado una campaña de perfil bajo.
A las 21.45 horas el conteo alcanzaba casi el 85% de los votos ante la estupefacción de Etxeberria, que señaló que en todos sus años de trabajo en ETB no le había tocado cubrir una noche electoral con un resultado tan apretado.
Lo que no cambió fue el partido vencedor en votos, el PNV, que seguirá gobernando en Euskadi junto a los socialistas con Imanol Pradales como lehendakari y Eneko Andueza como previsible vicelehendakari.