La princesa Leonor y la infanta Sofía están sujetas a rigurosas reglas y numerosas restricciones que abarcan desde la alimentación y los horarios hasta los estudios, la interacción social, el protocolo y otros aspectos peculiares. El rey Felipe y la reina Letizia han establecido un extenso conjunto de normas para garantizar la educación y el comportamiento adecuado de sus dos hijas, con un enfoque particular en Leonor, quien está destinada al trono. Como resultado, las jóvenes están obligadas a cumplir con un nivel de educación y conducta que supera su edad, según lo estipulado por las reglas del palacio real.
1UNA VIDA LLENA DE NORMAS
Esto quiere decir que las dos hermanas deben seguir un régimen de vida muy estructurado y disciplinado, con horarios estrictos para sus actividades diarias, incluyendo los estudios y las interacciones sociales. También se espera de ellas que mantengan ciertos estándares en cuanto a su conducta y conocimientos, incluso superando lo que sería habitual para su edad, debido a su posición dentro de la familia real. Las adolescentes deben cargar con el peso de un montón de prohibiciones que les impiden vivir como cualquier joven de su edad.