Querían que fuera declarada Zona de Especial Singularidad para lograr un mayor refuerzo de agentes, pero el ministro de Interior, además de diputado por Cádiz en el Congreso, Fernando Grande-Marlaska sigue sin hacer caso a esta petición porque bajo su punto de vista en el Campo Gibraltar ya se está «casi» en una consideración «de facto» como tal. Sin embargo, en la plantilla de la Guardia Civil no lo consideran así y creen que es insultante su última acción: anunciar tan solo 27 efectivos nuevos para la provincia gaditana, repartidos entre las comandancias de Cádiz y Algeciras.
Quien ha dado esa orden es la Dirección General de la Guardia Civil, que anunció el 9 de abril las vacantes distribuidas por todo el territorio nacional, olvidando aumentar los efectivos en unidades tan necesarias como Barbate, Sanlúcar, Chipiona, Zahara y Chiclana entre otras muchas.
«Y nombramos estas solo como ejemplo, pero siguiendo con las cifras para el Puesto de Conil de la Frontera no se han ofertado ni las vacantes que hay desiertas, los puestos de la Guardia Civil de La Janda también quedan olvidados de sumar efectivos, para todo el Campo de Gibraltar solo llegarán 12 guardias civiles para las unidades de Seguridad Ciudadana y las unidades de la Sierra de Cádiz solo ven ofertadas 10 vacantes que sirven para cubrir las que hay desiertas, pero no hay aumento de personal, siendo tan necesario», denunciaba la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC).
SEGÚN AUGC, LA SITUACIÓN EN CÁDIZ ES «INSOSTENIBLE»
Marlaska vuelve a hacer oídos sordos a las quejas que desde hace años transmiten los agentes aquí destinados, una situación laboral que bajo su punto de vista «es insostenible», pues día a día además de enfrentarse a los problemas de seguridad ciudadana de cualquier otro lugar del territorio nacional, deben enfrentarse a las mafias del narcotráfico y trabajar en una zona totalmente hostil con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
De hecho, a raíz del asesinato de los dos guardias civiles en Barbate, nació la asociación Nuestro Corazón por Bandera que lo componen familiares de guardias civiles y policías que trata de evitar otra tragedia como la sucedida en Barbate, y lo integran principalmente mujeres, con el propósito de reivindicar más materiales, sobre todo técnicos, la ampliación de efectivos en las zonas más necesitadas, respaldo legal y jurídico en desempeño de sus funciones, ser reconocidos como profesión de riesgo, acabar con el desequilibrio laboral de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad de estado con respecto a otras policías autonómicas y locales y la jubilación digna.
trabajar precariamente jugándose la vida a diario «por la inacción de nuestros gobernantes al negarnos unas plantillas operativas»
«Se han cumplido ya dos meses desde el asesinato de los dos compañeros de Barbate a manos del narcotráfico y desde entonces se vienen oyendo promesas del ministro del Interior sobre los refuerzos que se van a implementar en la zona, así como las declaraciones del Director de la Guardia Civil afirmando que el día del asesinato de los compañeros no detectó ningún error y al Secretario de Estado de Seguridad afirmar que van ganando esta batalla contra el narcotráfico escudándose en las cifras de enormes de aprehensiones y detenidos para intentar hacer creer que el problema con el narcotráfico en esta provincia está más bien atado, pero nada más lejos de la realidad», matizan fuentes de la AUGC, donde hay mucho desánimo por las vacantes insuficientes.
La escasez de efectivos les obliga además a trabajar precariamente jugándose la vida a diario «por la inacción de nuestros gobernantes al negarnos unas plantillas operativas», de ahí que insistan al Gobierno en general, y al Ministerio del Interior en particular, a «que tengan valentía y reconozcan el problema que aquí tenemos y que dejen de parchear y ocultar la realidad con cifras y datos confusos, para que de una vez por todas materialicen hechos encaminados a acabar con esta lacra antes de que tengamos que volver a lamentar la pérdida de más compañeros».
AUGC Y PP REIVINDICAN MÁS EFECTIVOS Y MEJORAR CONDICIONES
Además, los agentes no son los únicos que están reclamando el aumento de la plantilla en los cuarteles de la Guardia Civil. Recientemente, los senadores del Partido Popular por Guadalajara Lucas Castillo y María Patricio mantuvieron un encuentro en el Senado con miembros de la asociación Nuestro Corazón por Bandera para sumarse a su manifiesto en el que reclama «la necesidad de velar por la seguridad de los guardias civiles y policías nacionales y que realicen su trabajo con garantías».
Defendieron la necesidad de aumentar las plantillas de los agentes para poder realizar su trabajo con superioridad. Lamentablemente, «en Cádiz quedó constatada la inferioridad de condiciones en la que trabajan los guardias civiles y policías nacionales en este caso, frente al narco». Por ello, insistieron en que la zona del Campo de Gibraltar sea reconocida como de Especial Singularidad para así «conseguir una afluencia masiva de operativos contra el narcotráfico».
Castillo aprovechó para recordar que la provincia de Guadalajara también sufre la falta de efectivos en los diferentes puestos de la Guardia Civil, en concreto, más de 200 y criticó la remodelación que ha planteado el Gobierno socialista de España, donde «la previsión es la eliminación de 61 puestos auxiliares de la Guardia Civil. Decisión que genera inquietud tanto en la sociedad como en los propios guardias civiles y sus familias».
En la provincia de Guadalajara hay tres puestos auxiliares: los de Alustante, Milmarcos y Orea. Puestos, que, de cerrarse, «dejarán solamente a la zona de Molina de Aragón con la presencia de la Guardia Civil en los Puestos de Molina de Aragón, Checa, Maranchón y Zaorejas. Una mala noticia para nuestra provincia, que, de hacerse realidad, hará que la presencia y el trabajo de nuestros guardias sea aún más complicada», ha zanjado Castillo.
EL GOBIERNO ESTUDIA UNA REORGANIZACIÓN DE LA GUARDIA CIVIL
El Gobierno, en cambio, ha admitido que está estudiando «llevar a la práctica una reorganización» de la Guardia Civil para mejorar la prestación de los servicios de seguridad ciudadana y «adaptarlo a las nuevas demandas de la ciudadanía», teniendo en cuenta las oportunidades que brindan las nuevas tecnologías o el uso de vehículos más modernos.
Entre esas oportunidades cita: la gestión administrativa electrónica, el uso de herramientas telemáticas para la relación con los ciudadanos o «más y mejores medios tecnológicos para la coordinación de las diferentes unidades para cubrir el territorio», así como «más vehículos nuevos que permiten aumentar la presencia policial disuasoria y los tiempos de respuesta ante la comisión de delitos».
