La ensaladilla de lentejas es fácil de preparar y con pocos ingredientes se convierte en una opción para triunfar en cualquier evento familiar. Ya sea como acompañamiento para una barbacoa familiar, como parte de un buffet de aperitivos o incluso como plato principal en una comida ligera, su sabor y textura la hacen adecuada para cualquier ocasión.
Lo mejor de esta receta es su versatilidad. Puedes adaptarla según tus preferencias personales y los ingredientes que tengas a mano. ¿No tienes guisantes o maíz dulce? No hay problema, puedes omitirlos o sustituirlos por otros vegetales de tu elección. ¿Prefieres una ensaladilla más ligera? Puedes reducir la cantidad de mayonesa o incluso optar por una versión vegana utilizando mayonesa vegana, vinagreta o yogurt de soja.
Cómo preparar esta ensaladilla de lentejas
Para preparar una exquisita ensaladilla de lentejas para cuatro personas, comienza con la preparación de las verduras. Cortamos en brunoise medio pimiento verde, medio pimiento rojo, medio pimiento amarillo, media cebolla y una zanahoria. Es fundamental mantener un tamaño uniforme en el corte para garantizar una distribución equitativa de los sabores en cada porción de la ensalada. Este proceso también contribuye a una presentación visualmente atractiva y apetitosa del plato.
Una vez que las verduras están preparadas, las agregamos a un bol amplio que contiene las lentejas cocidas. Estas últimas, previamente cocinadas y escurridas, forman la base de nuestra ensalada. Las lentejas no solo añaden una textura reconfortante, sino que también están cargadas de nutrientes como proteínas y fibra, lo que hace que esta ensalada sea una opción saludable y satisfactoria.
Así se hace la vinagreta para realzar los sabores
Luego, preparamos una deliciosa vinagreta para realzar los sabores de la ensaladilla de lentejas. En un recipiente aparte, mezclamos 25 ml de vinagre de vino blanco, 75 ml de aceite de oliva virgen extra y sal al gusto. Batimos enérgicamente hasta lograr una emulsión homogénea. Esta vinagreta aportará un toque ácido y aromático que complementará perfectamente los ingredientes frescos de la ensalada.
Una vez lista la vinagreta, la incorporamos al bol que contiene las lentejas y las verduras. Mezclamos cuidadosamente para asegurarnos de que cada ingrediente esté impregnado con la deliciosa salsa. Este paso final es crucial para garantizar que cada bocado esté lleno de sabor y frescura. La ensaladilla de lentejas se puede servir de inmediato para disfrutarla en su máximo esplendor o refrigerarla para permitir que los sabores se desarrollen aún más con el tiempo. ¡Una elección perfecta para cualquier comida o cena familiar!
