«Renovables sí, pero no así» decía el cineasta Rodrigo Sorogoyen tras ganar un Goya el pasado año. El director de ‘As Bestas’, brillante retrato sobre un conflicto generado por la implantación de un parque eólico, advertía algunas sombras que destila la fiebre de proyectos de renovables.
La Moncloa abre las puertas de estos negocios de la mano de su vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, que no levanta la voz ante la voracidad de la empresa aragonesa Forestalia, que ha soliviantado a los gobiernos de Navarra y La Rioja por su interés en crear una línea de alta tensión que lleve electricidad desde Aragón hasta Euskadi.
El Gobierno central ha dado luz verde al proyecto de Forestalia, liderada por Fernando Samper y por la que acaba de fichar el exministro José Manuel Soria, que paradójicamente fue el ministro que recortó las primas a las renovables.
Semper se está granjeando un heterogéneo ejército de enemigos compuesto por el PSOE de Navarra, el nacionalismo vasco, el PP de La Rioja, Ecologistas en Acción de Aragón o el locutor Federico Jiménez Losantos.
EL GOBIERNO DE LA RIOJA Y FORESTALIA
Hasta ahora, el Gobierno riojano liderado por el ‘popular’ Gonzalo Capellán ha demostrado una insólita osadía al paralizar la aprobación de nuevos proyectos, hecho que según algunas empresas contraviene algunas leyes que señalan que el Estado debe promover este tipo de ‘energías limpias’.
El pasado 23 de enero, el pleno del Parlamento de La Rioja aprobó una proposición de ley «de medidas temporales y urgentes para la protección del paisaje». Esta moratoria ha sido replicada por el Gobierno central aprobando la citada línea de alta tensión, lo cual es calificado por Capellán como «un misil lanzado desde la Moncloa para destrozar nuestro territorio y nuestro paisaje único».
Vox y la coalición Podemos-IU secundó la iniciativa del PP riojano mientras que el PSOE se abstuvo ante esta medida que golpea a Samper, recientemente derrotado en los tribunales tras intentar anular algunas multas de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) que le sancionó por deducirse ilegalmente facturas por la construcción de una hípica junto a su mansión en Zaragoza sin licencia municipal ni autonómica.
El PSOE riojano se puso de perfil ante la propuesta del pp
El fallo asegura que «las instalaciones construidas por el obligado carecen de licencias municipales y autonómicas, por lo que las actividades equinas que el sujeto pasivo declara a efectos censales, no podrían ser realizadas. Con la única excepción de que se le dé un uso exclusivamente personal, tal y como se había declarado cuando la Inspección visitó las instalaciones por sorpresa».
Forestalia facturó en 2021 más de 293 millones de euros y obtuvo un beneficio de 14,6 bajo la batuta de Fernando Samper, nieto de Tomás Samper, que en los 40 comenzó a vender lechones, hijo de Fernando Samper Pinilla, creador del grupo cárnico Jorge en los 80.
Fernando junior, mayor de cinco hermanos, descubrió que con los purines podía generar electricidad con biogás y, tras un acuerdo con Endesa, saltó a los paneles solares con Forestalia, que es desde hace una década una de las empresas españolas más pujantes (y ruidosas) del sector.
INDIGNACIÓN CONTRA TERESA RIBERA
La Plataforma en Defensa del Territorio de Cinco Villas critica al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que lidera Ribera por «estar llevando a cabo una gestión arbitraria y negligente» al aprobar «proyectos especulativos con graves afecciones ambientales y sociales».
«Denunciamos que el Ministerio está llevando a cabo una gestión arbitraria y negligente ya que ha comenzado a aprobar proyectos especulativos con graves afecciones ambientales y sociales, y desoyendo la contestación ciudadana. Es incomprensible que Transición Ecológica haya aprobado la línea de evacuación a pesar de las advertencias y los informes desfavorables de las Comunidades Autónomas de Aragón, Navarra y País Vasco que señalan la gravedad que puede suponer esta línea para la biodiversidad y el paisaje, por atravesar o pasar muy cerca de numerosas zonas de gran valor ecológico y muchas de ellas protegidas», aseguran.
La directora general de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, Ana Bretaña, señala sobre la línea de alta tensión que «es como si creásemos una autovía paralela a la A-15 o cualquiera que ya exista en Navarra y además se prohíbe el uso a los vehículos navarros».
Ecologistas en Acción Huesca denunció que la línea «vulnera la legislación del sector eléctrico, que dicta que líneas de más de 380 kV deben ser consideradas como líneas de transporte, de construcción exclusiva por el operador del sistema eléctrico español, Red Eléctrica Española», que le acaba de retirar los permisos a Forestalia de renovables en la comarca aragonesa de Cinco Villas.
La empresa de Samper, acusada de no presentar a tiempo la Declaración de Impacto Medioambiental (DIA), recurrirá.
INDIGNACIÓN EN NAVARRA
El Gobierno de Navarra ratificó hace unos días su rechazo al proyecto de la promotora Forestalia de desplegar de cuatro líneas de alta tensión, de 400 kilovoltios cada una, para evacuar energía procedente de Aragón y trasladarla hasta la Comunidad Autónoma Vasca, atravesando el territorio de la Comunidad Foral.
En concreto, el consejo de Gobierno de Navarra acordó interponer un requerimiento previo a la vía contencioso-administrativa ante el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITERD) por haber formulado declaración de impacto ambiental positiva y haber otorgado autorizaciones administrativas previas de varias instalaciones de producción de energía eléctrica e infraestructuras de evacuación asociadas al proyecto sin haber tenido en cuenta los informes emitidos por la Dirección General de Medio Ambiente del Ejecutivo foral, que eran desfavorables por considerarlo incompatible con los valores ambientales, paisajísticos, sociales y culturales de su territorio.
Las discrepancias se fundamentan en cuestiones de forma y de fondo. Las cuestiones de forma hacen referencia al procedimiento, al considerar que la fragmentación del mismo llevada a cabo por la Administración General del Estado ha impedido a la Dirección General de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra una adecuada comprensión y valoración global de la magnitud real y definitiva del proyecto y su repercusión medioambiental.
En segundo lugar, se fundamentan cuestiones de fondo, ya que los proyectos analizados tendrán previsibles consecuencias adversas significativas sobre sobre el medio ambiente, en concreto sobre especies catalogadas, objetivos de conservación de espacios protegidos Red Natura 2000 y sobre conectividad y coherencia ecológica de esta misma red.
Cabe recordar que la Dirección General de Medio Ambiente del Gobierno foral ya emitió un primer informe desfavorable a dicho proyecto en el año 2021 y que, tras recibir las alegaciones de la empresa, se remitió un segundo informe igualmente desfavorable en 2022.
El requerimiento ahora interpuesto es un paso previo a la vía contencioso-administrativa y, en cualquier caso, el Gobierno de Navarra manifiesta «su total predisposición para colaborar y cooperar con la Administración General del Estado a fin de que se adopten las medidas requeridas sin necesidad de llegar a la vía judicial».
VERSIÓN DE FORESTALIA
Forestalia, por su parte, dice que «este proyecto contribuirá a alcanzar los objetivos de transición energético de La Rioja, Castilla y León y País Vasco, con una clara implicación empresarial con la responsabilidad social en todos los territorios donde realiza sus actuaciones de energías sostenibles».
Los de Samper dicen que «las nuevas conexiones tienen varios tramos soterrados, para minimizar afecciones ambientales, paisajísticas y socioeconómicas. Los ejes están alineados con las políticas internacionales: la Comisión Europea ha presentado un plan para impulsar las inversiones de mejora de las redes eléctricas, consciente de que son fundamentales en la transición energética».