El té verde es conocido por sus múltiples beneficios para la salud, incluyendo la mejora del metabolismo y la prevención de enfermedades crónicas. Sin embargo, no todo sobre el té verde es completamente beneficioso. Es importante considerar ciertos riesgos asociados a su consumo excesivo o inadecuado.
El té verde contiene compuestos llamados taninos, que pueden interferir con la absorción de hierro, especialmente si se consume junto con las comidas. Esta interacción puede aumentar el riesgo de anemia en personas susceptibles. Para minimizar este riesgo, es recomendable consumir el té verde entre las comidas y asegurar una dieta rica en hierro.
3RIESGOS DURANTE EL EMBARAZO Y LA LACTANCIA
El té verde, aunque seguro en cantidades moderadas, plantea ciertas consideraciones especiales durante el embarazo y la lactancia. La cafeína presente en el té puede cruzar la placenta y afectar al feto, cuyo metabolismo aún no está preparado para procesar esta sustancia.
Además, estudios sugieren que un consumo excesivo de cafeína durante el embarazo podría estar vinculado a un riesgo incrementado de complicaciones como bajo peso al nacer. Por ello, se recomienda que las embarazadas limiten su consumo de té verde a no más de dos tazas al día. Durante la lactancia, la cafeína también puede pasar a la leche materna, afectando potencialmente al bebé. Es prudente que las madres lactantes moderen su ingesta de té verde para evitar posibles efectos en el sueño o el comportamiento del lactante.